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Hitler y el Sacro Imperio Romano (septima parte)

Alemania y el Sacro Imperio Romano: capitulo cuatro

Continuación de Hitler y el Sacro Imperio Romano (sexta parte)

El espíritu de Carlomagno

Lo que está pasando en el súper Estado europeo es un misterio para gran parte del mundo. Pero ese misterio está comenzando a ser removido. Bernard Connolly escribió un libro sensacional en 1995 titulado El corazón podrido de Europa. Durante años él sirvió en el corazón del Mecanismo de Tazas de Cambio para la Unión Europea (UE). Encabezó la comisión responsable de supervisar y reparar el sistema. Él cataloga al súper Estado europeo como podrido. ¿Por qué así?

Aquí hay una cita de su libro: “Esta es la batalla por el control del súper Estado europeo, en la que los tecnócratas franceses confrontan a los federalistas alemanes, ambos lados clamando luchar bajo el estandarte de Carlomagno. El ‘daño colateral’ de esta batalla está principalmente en el futuro, pero esto podría ser espantoso”.

¿Quién va a tener el control de este gran súper Estado? La batalla puede limitarse a dos naciones: Francia y Alemania. ¿Duda realmente la gente informada quién ganará esta batalla? La nación que controla el dinero obtendrá la supremacía.

“A través del Rin, gobiernos alemanes sucesivos, en su búsqueda de un manto ‘europeo’ para las ambiciones alemanas, se han preparado para aceptar una aparente cesión de autoridad monetaria nacional, siempre y cuando la nueva autoridad monetaria europea parezca, suene, huela y actúe exactamente como la autoridad monetaria alemana lo hace en la actualidad” (ibíd.).

El sistema de la UE ya ha sido llamado un caballo de Troya. El Sr. Connolly dice que es un “manto para las ambiciones alemanas”.

Sólo que, ¿cuáles son esas ambiciones?

“El Bundesbank comenzó a usar por completo esta oportunidad, anulando su obligación de ‘apoyar la política económica general del gobierno’. En 1966, deliberadamente diseñó una recesión que destronó al Canciller Ludwig Erhard, quien, como Ministro de Finanzas, había dejado a un lado las objeciones del Bundesbank para la reevaluación del [marco alemán] en 1961. El presidente del Bundesbank de la época, Karl Blessing, comentó con evidente satisfacción que ‘tuvimos que usar la fuerza bruta para poner las cosas en orden’; una fórmula no muy diferente de aquellas usadas por los líderes militares en los países del Tercer Mundo, que en resumen deponen a un arrogante líder civil antes de volver a los cuarteles. No pasó inadvertido que George Kiesinger (el hombre que reemplazó a Erhard) fuera, como muchas otras prominentes figuras en el Bundesbank de ese tiempo, un antiguo miembro del partido nazi, a pesar del mucho o poco significado que este hecho pudiera tener” (ibíd.).

Aquí Connolly habla sólo de una institución alemana. ¡En 1966 el Bundesbank tenía “muchas figuras prominentes” que eran nazis! ¿Nos da esto alguna idea de hacia dónde está siendo llevado el súper Estado europeo? ¿Estamos temerosos de enfrentar la verdad de este libro acerca de lo que está ocurriendo en Alemania y Europa? ¿Tenemos miedo de enfrentar la profecía bíblica?

¡Los nazis saben cómo “usar la fuerza bruta para poner las cosas en orden”! Y no sólo en lo que se refiere al sistema financiero.

Todos estamos enterados del Tercer Reich de Hitler. El Sr. Connolly catalogó al imperio de Carlomagno como el primer Reich.

La mayoría de los líderes de la UE está trabajando para “resurgir el imperio de Carlomagno. No fue coincidencia que el gobierno belga albergara las oficinas y salas de reuniones del Consejo de Ministros de la UE en el edificio Carlomagno en Bruselas”.

“No fue coincidencia, tampoco, que Giscard y Schmidt estuvieran de acuerdo en aceptar el compromiso belga propuesto en una cumbre bilateral en septiembre de 1978 en Aachen, asiento principal y lugar donde está sepultado Carlomagno. El simbolismo fue altamente subrayado en Francia y Alemania; los dos líderes efectuaron una visita especial al trono de Carlomagno y en la catedral se llevó a cabo un servicio especial; al final de la cumbre, Giscard comentó que: ‘Quizás cuando discutimos los problemas monetarios, el espíritu de Carlomagno estuvo sobre nosotros’” (ibíd.).

El espíritu de Carlomagno ha vuelto. Este antiguo rey que gobernó el Primer Reich tuvo que abrirse paso a través de un “mar de sangre” para lograr su meta de gobernar Europa.

La gran pregunta permanece sin respuesta. “En el nuevo imperio de Carlomagno, ¿quién tendría el rol de Carlomagno? Exactamente la misma pregunta fue implícita, y dejada sin respuesta, en Maastricht” (ibíd.).

Pronto el mundo sabrá quién va a ser el Carlomagno moderno. Usted puede estar seguro de que tendrá el sello de aprobación de Alemania. Sus acciones impactarán al mundo mucho más de lo que el Carlomagno original lo hizo. ¡Él guiará al mundo al “mar de sangre” más grande que la humanidad haya visto jamás o que haya soñado ver! Ya sea que comprendamos esto o no, el Cuarto Reich ya está presente. 

Continuará ...

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