Reciba nuestro boletín gratis

Putin Xi Jinping

Carlos Barria/AFP/Getty Images

Edición especial: ¡Él tenía razón! (vigesimonovena parte)

¡Él tenía razón!: Los reyes de oriente

Continuación de Edición especial: ¡Él tenía razón! (vigesimoctava parte)

Rusia y China hoy

A pesar de la relación de amor-odio de China y Rusia en el pasado, ha habido colaboración resurgente entre las dos naciones desde el final de la Guerra Fría.

En 1989, el presidente soviético Mikail Gorbachev visitó a China para restaurar lazos y dar nuevo ímpetu a la demarcación de fronteras que había estado en disputa por siglos. Se dieron nuevos pasos en 1991 cuando Rusia y China firmaron un acuerdo oficial fronterizo.

Para abril de 1997, China, Rusia, Tayikistán, Kazajstán y Kirguistán se reunieron para firmar un acuerdo en Moscú sobre reducción de tropas y medidas de seguridad a lo largo de los 7.500 kilómetros de frontera entre la antigua Unión Soviética y China. Varios meses más tarde, en noviembre, una señal clara de su intento de mutua cooperación apareció: el presidente ruso Yeltsin y el presidente chino Zemin firmaron una declaración formal, poniendo fin a diferencias sobre la implementación del acuerdo fronterizo de 1991.

Este acto pareció confirmar que Rusia y China, con una relación histórica vacilando por mucho tiempo entre amigos y enemigos, entraban en una nueva era de cooperación y alianza estratégica para contrarrestar el dominio de Estados Unidos. Por ejemplo, entre 1991 y 1997, China compró $6 mil millones de dólares en armamentos rusos. En junio de 1999, los dos países firmaron un contrato para entrenar soldados chinos en escuelas militares rusas. Acercamientos adicionales se han hecho entre los dos países desde ese entonces.

El 6 de enero de 2000, el Consejero de Seguridad Nacional Sandy Berger le comentó al Club Nacional de Prensa que Rusia y China podrían amenazar seriamente a Estados Unidos si fortalecen sus lazos políticos. Acerca del fracaso de Rusia para completar su transformación en una democracia y economía de libre comercio, el Sr. Berger dijo: “Si [Rusia] falla y revierte a una dirección más nacionalista, o a una postura más amenazante o de línea más dura, podría bajo esas circunstancias resurgir como una amenaza … .” El Sr. Berger también dio una franca evaluación de China: “Un sentido de realismo nos advierte que estemos preparados para la posibilidad que este poder naciente emerja como una amenaza”.

Es evidente que funcionarios rusos y chinos están deseosos de formar una alianza nueva y contrarrestar lo que perciben como dominio de Estados Unidos en los asuntos mundiales. Diplomáticos rusos quieren crear un “mundo multipolar”, y saben que la manera más conveniente de hacerlo es consolidar relaciones con su vecino más cercano del sur.

El Ministro de Defensa chino Chi Haotian llegó a Moscú el 16 de enero de 2000 para conversaciones de tres días acerca de la solidificación de una alianza militar chino-rusa. En el primer día de las reuniones, el Sr. Chi expresó la esperanza de que los dos países fortalecieran la cooperación, sobre todo en la esfera militar. Dijo: “Estamos verdaderamente convencidos que bajo la ayuda y apoyo del presidente interino y primer ministro Vladimir Putin, nuestras relaciones de buenos vecinos se volverán más fuertes”.

Durante la reunión el Ministro de Defensa ruso Igor Sergeyev estuvo de acuerdo que las relaciones militares entre las dos naciones fueran “expandidas intensivamente”. También dijo: “le damos la bienvenida a cada reunión con nuestros amigos chinos. Nuestra comprensión mutua en todo asunto crece en todo sentido a medida que nos reunimos con mayor frecuencia”.

Los ministros firmaron un memorándum sobre comprensión mutua al final de sus conversaciones señalando cooperación militar y técnica entre Rusia y China. Las partes también discutieron el estado presente y las perspectivas de cooperación bilateral en defensa, comercio de armas y servicios relacionados, e intercambiaron opiniones sobre asuntos urgentes internacionales de interés común, particularmente el fortalecimiento de la seguridad en Asia Central, Asia Oriental y el Pacífico.

El futuro

La Pura Verdad de octubre de 1973 predijo que el avance democrático en Asia comunista fallaría finalmente. También declaró que una alianza de naciones socialista-comunista estaba en el pensamiento de líderes rusos y chinos. “Los comunistas no han cambiado de repente sus ideologías. No han llegado a creer que su sistema es irrealizable. Los comunistas tampoco han dejado sus esperanzas de guiar el mundo al socialismo. Pero profesan que sus metas se pueden lograr por medio de coexistencia pacífica”.

Actualmente, Vladimir Putin y Jiang Zemin sienten presión internacional sobre disputas territoriales internas. Por medio de sus acciones y el actual crecimiento de cooperación, le dicen a Occidente que atienda sus propios asuntos y que no busque dominio en el mundo pos Guerra Fría. Ven la urgente necesidad de reavivar sus raíces imperialistas.

Dios ha profetizado el resultado final de la naciente alianza asiática. Usando esas profecías, Herbert W. Armstrong y los escritores de La Pura Verdad, así como el cuerpo editorial de Trompeta, han avisado por adelantado con precisión de estas situaciones por muchos años. ¡El Sr. Armstrong murió en 1986, pero Trompeta continúa declarando que una Tercera Guerra Nuclear Mundial viene! ¡También estamos seguros que la afirmación del Sr. Armstrong — que “los reyes del oriente” forjarán una relación aún más profunda en los años futuros, y finalmente jugarán un papel importante en la próxima batalla de Armagedón — es correcta!

Aunque Estados Unidos e Inglaterra están destinados a caer, todavía decimos que no es a Rusia (ni un conglomerado ruso-asiático) al que debemos temer. ¡Es Alemania y el revivido “Sacro” Imperio Romano! Aún hoy, algunos todavía se reirán. Dicen que la Guerra Fría terminó y que no debemos temer una inminente guerra “caliente”. ¡Pero Trompeta dice que nuestro mundo está a punto de ser estremecido!

Nuestro mensaje no es sólo de “tristeza y destrucción”, a pesar de lo que nuestros críticos puedan pensar. ¡Un poco más allá de los tiempos peligrosos por venir está las increíblemente buenas nuevas! ¡Esa es la mayor noticia de todas! Ningún periódico principal está anunciando esas buenas noticias. ¡Simplemente no lo creen!

Esas buenas nuevas se tratan del evangelio del Reino de Dios. (La palabra evangelio significa “buenas nuevas”). La obra mundial de esta revista está anunciando activamente la crisis al cierre de esta Era; la crisis cuyo más importante portavoz de noticias de todos los tiempos, Jesucristo, advirtió en Mateo 24. Estamos anunciando una crisis que introducirá una era nueva y mejor, cuando todos los pueblos en todas partes empezarán a disfrutar paz y prosperidad bajo la dirección del gobierno divino de Dios. 

Continúa en Edición especial: ¡Él tenía razón! (trigésima parte)

HWR_ES_AD_1