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Panama Canal

Bernal Saborio/Flickr

Edición especial: ¡Él tenía razón! (vigesimosegunda parte)

¡Él tenía razón!: Cambio de guardia

Continuación de Edición especial: ¡Él tenía razón! (vigesimoprimera parte)

El Canal de Panamá

“A la una, a las dos …" decía el titular de un periódico el 3 de diciembre de 1999, con referencia a la entrega del Canal de Panamá por Estados Unidos. Veinticuatro años antes, La Pura Verdad desplegó este titular sobre el Canal: “A la una … a las dos … ¿Se fué?” (5 de abril de 1975). El artículo declaró: “Marquen mis palabras: el Canal se irá — si no pronto, en el futuro”. Eso se escribió dos años antes de que Jimmy Carter firmara el polémico tratado con Panamá que prometía la retirada norteamericana para fines de siglo.

Realmente, desde marzo de 1964, La Pura Verdad había advertido: “Estados Unidos, antes de que todo esto termine, va a perder el Canal de Panamá a menos que se arrepienta”. De nuevo, en noviembre de 1965: “¡Estados Unidos no han hecho nada más que dar rodeos, arrastrarse, regatear, rendirse, desistir, retroceder, y ceder desde que empezamos a construir [el Canal]!”

Sabiendo que Dios les había quebrantado el orgullo del poder, La Pura Verdad preguntó entonces: “¿Puede Dios cumplir Su palabra? ¿Tiene Él el poder para alterar el curso de las naciones y quebrantar nuestro poder? ¿Cumplirá Dios Su promesa divina de castigo a nuestras naciones? ¡La respuesta es un resonante sí!”

Entonces, en 1965, él predijo con confianza: “La historia demuestra que perderemos el Canal”.

Predijo correctamente cómo pasaría: “Panamá está destinado a irse — tarde o temprano. Pero no en gloriosa y heroica derrota después de fiel resistencia — sino en ignominia absoluta. En inútil y desvalido sacrificio — en desgracia y vergüenza”.

La Pura Verdad también estaba en lo correcto sobre quién llenaría el vacío de poder en la Zona del Canal: “¡Y, la ironía de las ironías, hasta podríamos ver ingenieros, pilotos y técnicos del mundo comunista al mando de los trabajos del canal dejados vacantes por los norteamericanos!” (julio de 1977).

Que todas estas predicciones hayan ocurrido ya, es asombroso. Estados Unidos se retiró sin confrontación, en ignominia absoluta. Los comunistas sí tomaron muchos trabajos dejados vacantes por los norteamericanos. Trompeta informó en el 2000, cómo una compañía de recursos portuarios asentada en Hong Kong, con conexiones comunistas en Pekín, ganó el control de los puertos de entrada y salida del Canal.

En Trompeta de enero 2000 [en inglés] les recordamos a nuestros lectores sobre lo que siempre habíamos dicho: el porqué Estados Unidos perdió su puerta marítima más estratégica: “Dios ha ‘quebrantado’ el orgullo de nuestro poder. Es esa la razón que nuestro pueblo no se conmueve con lo que está pasando en Panamá. ¡Hay algo en nosotros que no está nada bien! Tenemos miedo de usar el poder que Dios nos dio … ¿Cuántas más maldiciones debe darnos Dios antes que despertemos? Esa es la gran pregunta, a la que cada uno de nosotros debemos responder”.

Gibraltar

De las cuatro mayores puertas marítimas, el Sr. Armstrong mencionó en La Pura Verdad de octubre de 1954, sólo Gibraltar falta por entregarse. Más eso será antes que la Unión Europea ascienda al dominio mundial.

Ya es un hecho que Gran Bretaña ha perdido influencia sobre la fortaleza rocosa. “Si fuera por conveniencia política o por otro motivo, Inglaterra probablemente abandonaría Gibraltar”, declaró La Pura Verdad en septiembre de 1974.

En agosto de 1982, La Pura Verdad predijo: “a la larga, el gobierno británico plenamente piensa negociar el deshacerse de Gibraltar”.

Así fue, en junio de 1985, La Pura Verdad habló a sus lectores sobre el tratado entre Gran Bretaña y España donde los británicos finalmente estuvieron de acuerdo en tratar el asunto de soberanía de Gibraltar. “Para nosotros, esto realmente abre un proceso de descolonización de la Roca”, dijo un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de España.

Trompeta continuó el seguimiento de esta historia durante los años noventa. ¡En diciembre de 1997 dijimos a los lectores que los británicos “cederían esta gran puerta mediterránea sin ni siquiera un quejido!”

Concluyendo el artículo, Trompeta declaró: “El hecho es que Inglaterra no tiene en sí objeción alguna para entregarle Gibraltar a España, siempre y cuando ello sea aceptable a la mayoría de los habitantes de la Roca. Es decir, es simplemente cuestión de tiempo”.

Otras pérdidas considerables

Además de las cuatro mayores puertas marítimas que el Sr. Armstrong predijo que perderían, muchas otras también han sido abandonadas.

La principal entre esas es Hong Kong. Sin lucha, los británicos le regalaron esta joya del Mar de China Meridional al control comunista en 1997. En Hong Kong, China heredó no sólo uno de los centros comerciales más ricos del mundo, sino que tomó control de la base naval valorada en us$380 millones, construida por los ingleses. “Nunca antes tanto, usado por tantos, se ha dejado ir por tan poco”, declaró un miembro del Ministerio Británico de Defensa. “Con el fin del gobierno británico en Hong Kong”, escribió Trompeta, “vemos el acto final realizado en la clausura de un imperio (un imperio dado por Dios) y el cumplimiento de las maldiciones en aumento profetizadas sobre una nación mimada e ingrata: los británicos” (junio de 1997).

Suráfrica fue otra orgullosa posesión del Imperio Británico, controlando el canal frente al extremo sur de África. Pero la rendición de Suráfrica al Congreso Nacional Africano, influido por comunistas, acabó con gran parte del control de Gran Bretaña sobre el Cabo de Buena Esperanza. Trompeta informó a sus lectores sobre la entrega de esta puerta del mar en julio de 1994.

La isla de Malta es también otro fortín estratégico que Gran Bretaña ha entregado. Fue vital para el éxito británico en el Mediterráneo durante la Segunda Guerra Mundial. Sin embargo, en 1964, le concedió independencia política a los malteses. En 1979, lo último de las tropas inglesas salieron de la isla, incitando al primer ministro de Malta para declararlo su “Día de Libertad”. Al comentar sobre la pérdida de Malta y su vecina mediterránea, la isla de Chipre, La Pura Verdad dijo: “el poder marítimo británico … ha virtualmente desaparecido ahora del Mediterráneo, una vez llamado el ‘Lago Británico’” (septiembre 1979).

Ni siquiera la solitaria victoria por una puerta marítima durante los últimos 50 años llegó sin abochornamiento. En abril de 1982, Argentina tomó control temporalmente de las Islas Malvinas de Inglaterra. Localizadas a 400 kilómetros de la costa sur de Argentina, esta puerta marítima le da control a Inglaterra sobre el Estrecho de Magallanes. A pesar que la respuesta británica a la insurrección agobió a los argentinos, no fue nada fácil. Argentina derribó a 34 aviones británicos y les hundió seis barcos, matando a 236. El hecho que Argentina desafiara a Gran Bretaña mostró simplemente cuánto daño se había hecho a la imagen británica en la anteriores concesiones de puertas marítimas. Al igual que Gibraltar y el Cabo Occidental [Ciudad Cabo, Suráfrica], están contados los días de las Malvinas bajo el gobierno británico.

Podríamos seguir. Pero el punto es este: Durante la última mitad del siglo 20, Estados Unidos e Inglaterra han perdido el control de casi toda puerta marítima vital en el mundo. Herbert W. Armstrong profetizó estas pérdidas estratégicas porque él usó la Biblia como su guía para entender los eventos mundiales.

Por esa razón, nos volvemos a él para ver a dónde está conduciendo todo esto: El sol ya se ocultó en el Imperio británico, él escribió hace más de tres décadas en La Pura Verdad. Y porque eeuu vino al poder un poco después que Inglaterra, su puesta de sol vendrá en seguida de la de Gran Bretaña. Pero desde hace mucho ambas naciones han perdido el orgullo que tuvieron una vez en su poder. Dios dijo que esto pasaría a causa de su pecado desenfrenado y rebelión contra Su ley. Por esa razón, el Sr. Armstrong concluyó en La Pura Verdad de septiembre de 1966: “La medianoche se aproxima rápidamente”. 

Continúa en Edición especial: ¡Él tenía razón! (vigesimotercera parte)

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