Un ‘nuevo capítulo’ en la cooperación franco-alemana

El canciller alemán Friedrich Merz y el presidente francés Emmanuel Macron se reunieron el 29 de agosto en un Consejo Ministerial franco-alemán en Tolón. La reunión conjunta tenía por objetivo mostrar la estrecha relación entre ambos países.

Discutieron ocho conceptos estratégicos y 20 proyectos emblemáticos, la mayoría centrados en la preparación de sus ejércitos para la batalla. En el pasado, su rivalidad dividió a Europa durante siglos de conflicto, pero ahora ambas naciones aspiran a consolidar su poder para ayudar a dar forma a una superpotencia europea unificada.

El día de la reunión, Macron calificó las conversaciones de “punto de inflexión”:

Cuando Francia y Alemania deciden avanzar juntas, el ritmo de toda Europa cambia.

Hoy, en Tolón, pondremos ocho piedras angulares para construir el futuro. Adoptaremos ocho documentos estratégicos y pondremos en marcha más de 20 proyectos clave.

Este Consejo Ministerial franco-alemán no es una reunión ordinaria: marca la culminación de meses de trabajo conjunto y el inicio de una nueva dinámica.

La industria, la descarbonización, la tecnología, el espacio, la investigación cuántica, la inteligencia artificial, las finanzas e incluso la defensa: en todos estos ámbitos lanzaremos proyectos concretos con visión de futuro, con fechas ya fijadas para el próximo mes, a fin de avanzar sin interrupción. (…)

No es sólo nuestra amistad la que se reafirma hoy en Tolón. Se está marcando un nuevo rumbo europeo.

Por eso este Consejo Ministerial franco-alemán es un punto de inflexión. Un punto de inflexión que Francia y Alemania han elegido juntas, para sus pueblos y para Europa.

La reunión tuvo lugar en Fort de Brégançon, la residencia de verano de Macron frente a la costa mediterránea francesa, que ha servido durante mucho tiempo como sitio militar y cayó brevemente bajo control alemán durante la Segunda Guerra Mundial. Spiegel describió la visita como “un raro honor”, señalando que antes de Merz, sólo dos cancilleres alemanes habían sido recibidos allí.

Las relaciones franco-alemanas se han enfriado en los últimos años. Pero con el nuevo gobierno alemán llega “un nuevo capítulo”.

Y creo que el dúo franco-alemán está ahora perfectamente alineado para crear una Europa más fuerte en los sectores de la economía, el comercio y la moneda, pero también para crear una Europa que afirme su posición geopolítica en el conflicto de Ucrania ante la guerra de agresión iniciada por Rusia, y una Europa que afronte estos retos y que ha decidido rearmarse para garantizar su protección.
—Emmanuel Macron

Merz y Macron acordaron en el Consejo iniciar un “diálogo estratégico” sobre la disuasión nuclear. En una declaración conjunta, dijeron que era “una piedra angular de la seguridad de la otan”.

“Discutiremos con la necesaria confidencialidad la manera de garantizar cada vez más la seguridad de Europa por nuestra cuenta”, declaró Merz en una rueda de prensa conjunta después de la reunión. Alemania y Francia quieren discutir “enfoques conjuntos sobre cuestiones de disuasión”. “Esto no sustituye a la otan, pero refuerza la parte europea de la otan”, añadió.

“A fin de cuentas, está claro que el dúo ‘Merzcron’ está muy lejos de la fría sospecha mutua entre [el ex canciller alemán Olaf] Scholz y el presidente francés”, escribió Deutsche Welle. “Pero todos los abrazos y palmadas en la espalda no pueden borrar el hecho de que París y Berlín siguen teniendo intereses nacionales fundamentalmente diferentes”.

Uno de sus mayores retos es ponerse de acuerdo sobre cómo proceder con el ambicioso proyecto del Sistema Aéreo de Combate Futuro, que incluye un caza de sexta generación capaz de desplegar armas nucleares. En los últimos años, el proyecto, en el que España también está muy implicado, se ha visto retrasado por diversas disputas sobre cómo repartir las responsabilidades industriales, con Francia insistiendo en dominar en gran medida el proyecto.

Con un costo previsto de 100.000 millones de euros (116.600 millones de dólares estadounidenses), es el proyecto de defensa más caro de Europa. Al igual que el Sistema Principal de Combate Terrestre, también liderado por Alemania y Francia, el Sistema Aéreo de Combate del Futuro se concibe como un verdadero “sistema de sistemas” para Europa, que integra plataformas aéreas tripuladas y no tripuladas.

El hecho de que Francia y Alemania no lograran poner en marcha el proyecto, combinado con el hecho de que la reunión del gabinete conjunto fuera más espectáculo que sustancia, dejó a algunos decepcionados. Unir todos los elementos de este ambicioso proyecto parece tan difícil como intentar fundir hierro con barro.

De hecho, la Biblia pronosticó exactamente esta situación. Daniel 2 describe una sucesión de imperios, cada uno de los cuales se levantará para superar al anterior en poder y fuerza militar. Sin embargo, el último imperio, y el más formidable, está representado por 10 dedos —una mezcla de hierro y barro— que simbolizan 10 gobernantes divididos entre oriente y occidente y caracterizados por la desunión.

Apocalipsis 17 muestra que estos líderes se unirán en tiempos de crisis bajo una autoridad suprema. “Y los diez cuernos que has visto, son diez reyes, que aún no han recibido reino; pero por una hora recibirán autoridad como reyes juntamente con la bestia. Estos tienen un mismo propósito, y entregarán su poder y su autoridad a la bestia” (versículos 12-13).

Cuando estalle la crisis, estos líderes dejarán sus disputas a un lado para ceder su poder a un líder supremo, sin duda un alemán. (Lea Un líder alemán fuerte es inminente.)

Por eso vigilamos de cerca la alianza franco-alemana. Aunque los detalles continúen en disputa, Merz y Macron están comprometidos con la creación de un superestado o imperio europeo. Pero como advirtió el redactor jefe de la Trompeta, Gerald Flurry: “La historia europea tiene muchos ejemplos de personas tratando de establecer un imperio europeo: Carlomagno, Napoleón, Adolfo Hitler y otros. ¡Todos fueron tiempos aterradoramente sangrientos en Europa!”.

La alianza franco-alemana proporciona el modelo para una Europa unida militarmente que la Biblia profetizó hace miles de años. Para saber más, lea “La ignorancia mortal de Francia sobre Alemania”.