¿Se trasladará Hamás a Cisjordania?

Si Hamás acepta este acuerdo, no representará el fin de su radicalismo, sino un cambio táctico. Los yihadistas no renuncian a su lucha.

Su movimiento más probable sería trasladar sus operaciones a Cisjordania, mucho más vital estratégicamente que Gaza.

Como escribió Khaled Abu Toameh en el Gatestone Institute, Irán y sus aliados terroristas palestinos ya han empezado a trasladar allí sus operaciones.

Recientemente, células armadas pertenecientes a Hamás y a la Yihad Islámica Palestina (PIJ, por sus siglas en inglés), respaldadas por Irán, han intensificado sus atentados terroristas en Cisjordania contra soldados y civiles israelíes. Fuentes [de seguridad israelíes] afirmaron que elementos vinculados a Irán estaban detrás del plan para convertir Cisjordania en un nuevo campo de batalla contra Israel. (…)

Aunque termine la guerra en la franja de Gaza, Catar, Irán, Hamás y la PIJ nunca abandonarán la lucha por destruir Israel y sustituirlo por un Estado islamista radical. El intento de transformar Cisjordania en una segunda base para la yihad pone de relieve que el fin de la guerra en la Franja de Gaza no acabará con el sueño de borrar a Israel del mapa.

Si Cisjordania estallara en violencia, enfrentarse a ella sería mucho más problemático para Israel y provocaría una indignación internacional mucho mayor que la guerra en Gaza.

La profecía bíblica muestra que el conflicto árabe-judío más candente estallará en Jerusalén, el disputado corazón del país. Zacarías 14:2 describe la toma de la mitad de la ciudad y esa violencia desencadenando una guerra más amplia, explica Gerald Flurry en “Jerusalén a punto de estallar”, capítulo 3 de Jerusalén en profecía. 

El resultado inmediato del último esfuerzo de paz del presidente Trump se entenderá mejor en los próximos días y en las próximas semanas. Pero la idea de que producirá la “paz eterna” es totalmente errónea. Dios promete que la “Ciudad de la Paz” gozará de paz eterna, pero sólo cuando esté gobernada por el Rey de reyes.