Reciba nuestro boletín gratis

Portland se arrepiente de sus devastadoras leyes sobre drogas

La Trompeta

Portland se arrepiente de sus devastadoras leyes sobre drogas

Las consecuencias de las actuales leyes sobre drogas en Portland, Oregón, son tan devastadoras que incluso los adictos desean que las drogas vuelvan a ser ilegales, informó el Daily Mail el 8 de noviembre. En noviembre de 2020, Oregón se convirtió en el primer Estado estadounidense en legalizar la posesión de todas las drogas duras, incluidas la heroína, la metanfetamina y el fentanilo.

Utah, un drogadicto de 33 años de la ciudad, admitió que no entiende por qué la gente de Oregón votó a favor de esa política.

Lo empeoró. No me malinterpreten, para mí lo hace mejor, pero quitarnos a la policía de encima y darnos pipas y papel de aluminio gratis para consumir nuestras drogas no nos va a sacar de las calles.

—Utah


Adictos en todas partes: cuando caminan por las calles de Portland, la gente de la ciudad tiene que pasar por encima de agujas usadas, pipas de cristal destrozadas y excrementos humanos, a menudo mientras los adictos les gritan.

El grito que escucho en el centro de Portland una y otra vez es: “Hay una persona que está consumiendo fentanilo delante de mi hijo”, o “Estoy en un parque y esta persona claramente está en dificultades”.

—Aaron Schmautz, líder sindical de la policía


Pero la policía no puede hacer mucho para mejorar la situación; no se le permite registrar a los adictos, y mucho menos confiscar sus drogas.

Remordimientos amargos: las encuestas muestran que la mayoría en Portland quiere revertir la ley, que se conoce como Medida 110, debido a sus efectos catastróficos en la ciudad.

  • Las sobredosis mortales accidentales en la región han aumentado un 500% en los últimos cuatro años.

  • Los delitos violentos aumentaron un 413% entre 2019 y 2022.

  • El número de personas sin hogar aumentó un 29% respecto a 2022.


Parece que después de casi tres años en los que el centro de Portland, antes atractivo y vibrante, se ha convertido en un paisaje infernal cubierto de tiendas de campaña en el que se multiplica la delincuencia, el abuso endémico de drogas y el comportamiento maníaco, el resto de la ciudad ha aceptado por fin que el experimento de la despenalización ha fracasado estrepitosamente.

—Tom Leonard, periodista del Daily Mail


La guerra contra las drogas: cada vez más gobiernos occidentales despenalizan el consumo de drogas, argumentando que las consecuencias legales sobre las drogas disuaden a los adictos de buscar ayuda. Sin embargo, un caso tras otro demuestra que la relajación de las leyes contra las drogas conduce a un aumento significativo de su consumo, junto con otras innumerables consecuencias destructivas para la sociedad.

Estados Unidos está perdiendo la guerra contra las drogas. Sin embargo, hay una solución sencilla: guardar la ley de Dios. En su folleto No hay libertad sin ley, el redactor jefe de la Trompeta, Gerald Flurry, escribe:

El problema no está en la ley, sino en nosotros. Necesitamos cambiar y amoldarnos a esa ley. ¡Tenemos que grabar la ley de Dios en nuestros corazones para sustituir por la justicia de Dios la maldad que hay en ellos!