Reciba nuestro boletín gratis

La muerte de Benedicto XVI apunta a una reunión anglicana

La muerte de Benedicto XVI apunta a una reunión anglicana

El papa Benedicto XVI falleció el 31 de diciembre. Tenía 95 años. Como papa, Benedicto fue el líder de la Iglesia católica y soberano de la Ciudad del Vaticano de 2005 a 2013. En 2013, hizo historia como el primer papa que renunciaba a su cargo desde Gregorio xii en 1415. Desde entonces, vivió en un monasterio de la Ciudad del Vaticano con el nuevo título de “papa emérito”. El Vaticano ha programado su funeral para el 5 de enero. Su sucesor, el papa Francisco, presidirá su funeral.

Su muerte ha sido recibida con una avalancha de elogios, quizá de forma más notable por parte del Reino Unido:

Recuerdo con cariño mi encuentro con su santidad durante mi visita al Vaticano en 2009. (…) También recuerdo sus constantes esfuerzos por promover la paz y la buena voluntad entre todos los pueblos, y por fortalecer la relación entre la Comunión Anglicana mundial y la Iglesia Católica Romana.

—Rey Carlos iii


El Papa Benedicto fue uno de los más grandes teólogos de su época, comprometido con la fe de la Iglesia e incondicional en su defensa. En todas las cosas, sobre todo en sus escritos y en su predicación, su mirada estaba puesta en Jesucristo, la imagen del Dios invisible. Estaba muy claro que Cristo era la raíz de su pensamiento y la base de su oración. (…) Que ahora descanse en la paz de Cristo y resucite en la gloria con todos los santos.

Justin Welby, arzobispo de Canterbury


Fue un gran teólogo cuya visita al Reino Unido en 2010 fue un momento histórico para católicos y no católicos de nuestro país.

—Rishi Sunak, primer ministro británico


El difunto Papa ha sido llamado al cielo. (…) Fue en la tierra una figura muy santa. Así que me parece, sin ser presuntuoso, que es probable que se haya ido a la gloria celestial.

—Jacob Rees-Mogg, ex líder de la Cámara de los Comunes


Reconciliación: Rees-Mogg, no obstante, es católico romano. Pero el Rey y el arzobispo de Canterbury son el gobernador supremo y el primado, respectivamente, de la Iglesia de Inglaterra. La Iglesia de Inglaterra y la Iglesia católica no están en comunión entre sí. Históricamente, las relaciones han sido francamente hostiles. Sin embargo, parece que los dirigentes británicos casi lo han olvidado. Es histórico el hecho de que un arzobispo de Canterbury llame a un Papa “uno de los más grandes teólogos de su época”. Algunos de los comentarios de Welby sugieren que él considera a los anglicanos y a los católicos como parte de la misma fe.

Tanto respetaba el gobierno británico a Benedicto que incluso ordenó que las banderas ondearan a media asta.

Una predicción audaz: La Pura Verdad, predecesora de la Trompeta, escribió lo siguiente en octubre de 1961:

El papa intervendrá como la suprema autoridad unificadora, la única que puede finalmente unir a las distintas naciones de Europa. La jurisdicción de hierro tanto de las escuelas como de la religión serán entregadas a la Iglesia Católica Romana. Europa se hará católica romana! El protestantismo será absorbido por la iglesia “madre” y totalmente abolido.

La reacción de Gran Bretaña ante la muerte de Benedicto sugiere que esto no está lejos en el horizonte.

Para saber más: Lea el capítulo 3 de nuestro folleto Él tenía razón.