La directora de Inteligencia Nacional Tulsi Gabbard investiga a Anthony Fauci

La epidemia de covid -19 puso nuestro mundo al revés y permitió una opresión gubernamental sin precedentes en todo el mundo. Cinco años después del brote, muchas naciones aún no se han recuperado de los efectos del confinamiento. Esto hace aún más escandaloso que el gobierno de Estados Unidos probablemente haya desempeñado un papel en la creación del virus.

Ocultando la filtración: un reportaje exclusivo de Daily Caller publicado el 20 de agosto destaca cómo altos funcionarios de inteligencia estadounidense ocultaron deliberadamente, tanto al presidente Donald Trump como al público, información sobre cómo el virus de la covid-19 se filtró desde el Instituto de Virología de Wuhan.

Ocultar estos documentos le otorgó al Dr. Anthony Fauci, director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas, y a su círculo íntimo una enorme libertad en su intento de hacer que el virus de la covid-19 pareciera natural.

Descubriendo la conspiración: la oficina de la Directora de Inteligencia Nacional, Tulsi Gabbard, ha estado trabajando con el Director de los Institutos Nacionales de Salud, Jay Bhattacharya, y el Secretario de Salud y Servicios Humanos, Robert F. Kennedy Jr. durante meses para investigar los orígenes de la pandemia de la covid-19.

Según el Daily Caller, la inteligencia de señales recopilada de los líderes del Partido Comunista chino en 2019 muestra que la Comunidad de Inteligencia de EE UU sabía que había una gran emergencia en Wuhan, pero ocultó esta información al presidente Trump durante dos meses para que los medios corporativos pudieran desviar la culpa del coronavirus de China hacia el presidente Trump. En otras palabras, la Comunidad de Inteligencia de EE UU empeoró la pandemia de coronavirus para perjudicar las posibilidades de reelección del presidente Trump.

Científicos espías también descifraron la ingeniería (también conocida como ganancia de función) en el genoma del virus de la covid-19, pero esta información se omitió en los informes públicos de la Comunidad de Inteligencia publicados por Joe Biden. Esta omisión permitió que los científicos del Dr. Fauci promovieran la teoría de que la covid-19 se originó en un mercado húmedo.

La administración Biden no quería que se hiciera público el hecho de que la covid-19 fue creada artificialmente, ya que el virólogo Ralph Baric, de la Universidad de Carolina del Norte, fue quien enseñó a los científicos chinos en Wuhan cómo empalmar virus. Esto significa que la pandemia de la covid-19 probablemente nunca hubiera ocurrido si EE UU no hubiera colaborado con la China comunista.

Biden emitió un indulto preventivo para Fauci el 20 de enero, por lo que podría ser difícil responsabilizarlo. Sin embargo, Gabbard todavía quiere responsabilizar a la Comunidad de Inteligencia. “Está claro que las opiniones disidentes probablemente fueron silenciadas para apoyar la narrativa preferida de la administración Biden”, le dijo a la Fundación Daily Caller News. “Bajo la agenda de máxima transparencia del presidente Trump, estamos comprometidos a exponer la verdad para que podamos reconstruir la confianza en la comunidad de inteligencia”.

Aflicción amarga: respecto a EE UU y Gran Bretaña, una profecía en 2 Reyes 14:26-27 dice: “Porque [el Eterno] miró la muy amarga aflicción de Israel; que no había siervo ni libre, ni quien diese ayuda a Israel; y [el Eterno] no había determinado raer el nombre de Israel de debajo del cielo; por tanto, los salvó por mano de Jeroboam hijo de Joás”.

Cuando se ven todas las formas en que la izquierda radical ha usado la pandemia de la covid-19 para atacar a EE UU, es claro que este país estaba sufriendo una amarga aflicción hasta la reelección de Trump. Ahora hemos entrado en una era de exposición donde veremos lo mal que se pusieron las cosas. Dios quiere que veamos la profundidad de la corrupción que infectó al gobierno estadounidense para que podamos alejarnos de ella y arrepentirnos. Volver a Dios es la única esperanza de la nación.

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