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La dimensión que falta en la educación

La dimensión que falta en la educación

Transcripción de La Llave de David

La educación en este mundo no sabe cómo resolver nuestros problemas. Pero en nuestros colegios, enseñamos a nuestros estudiantes cómo estos problemas del mundo se resolverán, e incluso mostramos a la gente cómo se van a resolver. Hay una solución. Pero tenemos que recordar que en este mundo nuestro principal problema es el de la supervivencia humana. La gente no piensa mucho en ello porque es demasiado aterrador incluso decirlo, supongo, y tratan de ni pensar de lo grave que es este problema.

Hemos proclamado esa solución por más de 75 años diciéndole a la gente cómo se van a resolver los problemas de este mundo. En nuestros colegios, también hemos mostrado a la gente cómo resolver sus problemas personales incluso hoy en día y eso es un gran paso en esa dirección.

Demos un vistazo a la dimensión que falta en la educación. Falta una dimensión.

Por lo que puedo ver, el primer colegio que Dios levantó en la historia fue durante el tiempo de Samuel. Y Samuel es uno de los profetas anteriores, así que tenía mucho de que profetizar. Cuando Samuel entró en escena, Israel acababa de pasar por 450 años de los jueces, y fue una época aterradora, con todo tipo de matanzas —la época más sangrienta jamás en Israel. Así que no tenían solución; se habían alejado de Dios y estaban por su cuenta, y cada uno hacía lo que bien le parecía, y ay, ¡cómo sufrieron! Y entonces, finalmente Samuel entró en escena y comenzó a cambiar todo eso para Israel. ¿Y cómo lo hizo? ¿Cómo lo hizo?

Si leemos en Hechos 13:20, habla de este período; ese es el libro que Lucas escribió. Así que este es un tema vital, y un asunto que realmente necesitamos analizar y estudiar y de hecho deberíamos estar orando para verlo porque Dios nos da visión y comprensión si realmente lo llevamos a Él de una manera humilde. Así que pensemos en este período y demos un vistazo a Hechos 13 verso 20 para empezar. “Después, como por cuatrocientos cincuenta años, les dio jueces hasta el profeta Samuel”. Uno de los profetas anteriores. “(21) Luego pidieron rey, y Dios les dio a Saúl hijo de Cis, varón de la tribu de Benjamín, por cuarenta años. (22) Quitado éste, les levantó por rey a David, de quien dio también testimonio diciendo: He hallado a David hijo de Isaí, varón conforme a mi corazón, quien hará todo lo que yo quiero”. Y sucedió que Samuel ungió como rey a David, pero luego tuvo que esperar 17 años y medio antes de ser coronado, y pasó por algunas pruebas realmente ardientes en ese proceso. Dios estaba preparando a David para algo mucho más grande. Lo iba a hacer rey de todas las doce tribus de Israel; para eso lo estaba preparando.

Verso 23: “De la descendencia de éste, y conforme a la promesa, Dios levantó a Jesús por Salvador a Israel”; luego en verso 24: “Antes de su venida, predicó Juan el bautismo de arrepentimiento a todo el pueblo de Israel”. Así que ahora tenemos a Samuel y a David, y David entra en escena y juega un papel clave en toda esta historia.

Pero Samuel levantó tres colegios, tres de ellos. Veamos Hechos 3, versos 20, 21 y 24. Esto es algo que muestra cuán valiosos son hoy los cimientos educativos que Samuel estableció; son grandes lecciones para que aprendamos. El Sr. Armstrong levantó tres colegios en el mundo, y él siguió muchos de los principios de Samuel para levantar sus colegios, y nosotros por supuesto hemos hecho lo mismo que el Sr. Armstrong y su colegio porque él nos precedió y sabemos que sus colegios enseñaban la verdad misma de Dios. Pero noten lo que dice aquí: “Y él envíe a Jesucristo, que os fue antes anunciado; (21) a quien de cierto es necesario que el cielo reciba hasta los tiempos de la restauración de todas las cosas, de que habló Dios por boca de [todos] sus santos profetas que han sido desde tiempo antiguo”. “(24) Y todos los profetas desde Samuel”, todo comenzó con Samuel, “en adelante, cuantos han hablado, también han anunciado estos días”. Los profetizaron a lo largo de la historia. Dios se encargó de que eso sucediera.

Y aquí tenemos a Pedro mencionando específicamente a Samuel como el individuo que comenzó todo esto después de los jueces, después de esos 450 años y realmente no tenían ningún tipo de institución para darle al pueblo una solución. Pero Dios le mostró a Samuel que necesitaba levantar tres colegios, y ¿qué enseñó él? Bueno, les diré que fue la profecía bíblica en lo que más se enfocó; la profecía bíblica. Recibimos la revelación de Dios a través de la profecía bíblica, y Dios dice: Ahora bien, si haces lo que te digo te daré revelación. Te mostraré cómo puedes resolver tus problemas, y te mostraré cómo se resolverán A pesar de ti, aun si te rebelas. Pero significa mucho más sufrimiento si eso es lo que elegimos.

Pero aquí está uno de los profetas anteriores, ¡él predijo de estos días! Él predijo de este tiempo final, el tiempo de Pedro y esos hombres en el primer siglo, y ellos pensaron que ellos estaban en el último tiempo, pero tuvieron que ver un poco más tarde que no, que sólo era un tipo del tiempo final, cuando tuvieron que entrar en el año 70 d. C. Y todos los apóstoles habían sido martirizados antes de ese tiempo. Así que esos líderes realmente la pasaron mal porque este mundo, en su mayoría, nunca ha sido receptivo a la verdad de Dios, y se enojan mucho a veces incluso cuando oyen la verdad de Dios. Pero no debemos hacer eso; es lo peor que podríamos hacer. Tenemos que enfrentar estas cosas y ¡qué bendición es!

Noten lo que dice el Comentario de Soncino: “La mayor reivindicación de Samuel y el más permanente de los logros de su vida, fueron las escuelas de los profetas que él fundó, y de las que surgió (en la obra de los profetas hebreos), la creación suprema del genio religioso de Israel. Donde el don de profecía…”, el don de profecía, Dios lo da como un don, si nos humillamos y somos como un pequeño bebé, o un niño, Dios nos lo dará, Él dice. “… donde el don de profecía existía, las escuelas lo desarrollaban, pero los miembros de las escuelas formaban una levadura religiosa y moral en la vida del pueblo”. Ven, esta es una lección para nosotros hoy. Es lo que Pedro nos decía en los Hechos. Necesitamos entender de qué se trata todo esto, y Samuel levantó tres colegios, tres colegios, y enseñó algunas de las profecías más grandes que se proclamarían en la Biblia. Samuel tenía mucho que decir sobre la profecía bíblica.

Y también nosotros aquí en Edmond hoy, también tenemos mucho que decir sobre eso. Nuestra comisión es profetizar otra vez (Apocalipsis 10 verso 11). Debemos profetizar otra vez; Herbert Armstrong levantó tres colegios. Hemos levantado dos y un colegio a tiempo parcial incluso en Jerusalén, porque tenemos el Instituto de Arqueología Bíblica en Jerusalén, y estudiamos la arqueología muy de cerca porque, también, profetiza lo que viene. Créanlo o no, hay mucha profecía en la arqueología, mucho entendimiento.

Ahora déjenme leerles una Escritura en 1ª de Samuel 3 verso 1. Aquí dice: “El joven Samuel ministraba a [el Eterno] en presencia de Elí; y la palabra de [el Eterno] escaseaba en aquellos días; no había visión con frecuencia”. Bueno, ¿qué significa eso? “¿No había visión con frecuencia?”. Significa que no hubo revelación de Dios en todos esos 450 años porque no querían que Dios los guiara. Se deshicieron del rey que Dios les dio. Se deshicieron de Samuel. No les gustaba eso, querían resolverlo ellos mismos, y se convirtió en la historia más sangrienta que Israel tuvo que experimentar. Quiero decir, ese fue un tiempo abismalmente degenerado en Israel.

Versos 2 y 3: “Y aconteció entonces, que estando Elí relajado en su lugar”, en otras palabras, sus dos hijos se relajaron y desobedecieron a Dios y realmente gobernaban a su padre, y eso no le agradó a Dios para nada, “cuando sus ojos comenzaban a oscurecerse de modo que no podía ver, (3) Y he aquí que la lámpara de Dios se apagó en el templo de [el Eterno], donde estaba el arca de Dios...” [vkj, traducción nuestra]. Miren aquí, la lámpara simplemente se apagó. Lo mismo sucedió en nuestra Iglesia después de la muerte del Sr. Armstrong. La lámpara se apagó, ellos tiraron la verdad al suelo, y ahora Dios no les dio “visión con frecuencia”, o ninguna nueva revelación. Y tuvimos que pasar 1.150 días sin ningún tipo de revelación después de eso.

La lámpara, se llama, esa lámpara es la lámpara de Elohim que realmente significa la Familia Dios. Se trata de Dios construyendo Su Familia, la propia Familia de Dios. Y para hacer eso, hay que tener profecía bíblica y entender realmente de qué se trata la visión. Y qué maravilloso entendimiento nos da la profecía a todos nosotros y nos inspira y mueve a hacer lo que necesitamos estar haciendo. Pero la Familia Dios es cuando la Iglesia está unida y obedeciendo a Dios, y realmente es la Familia Dios en la Tierra, y va a ser expandida a billones y billones de personas antes de que todo termine con las resurrecciones y todo lo demás.

Noten lo que dice en los versos 12 y 13, habla de los hijos de Elí y de cómo Elí fue castigado severamente porque no controló a sus hijos.

Y luego el verso 14: “Por tanto, yo he jurado a la casa de Elí que la iniquidad [o desafuero] de la casa de Elí no será expiada jamás, ni con sacrificios ni con ofrendas”. Dios estaba así de enojado hacia Elí y lo que hizo para alejar a Israel de Dios.

Y entonces, aquí estaba un adolescente, Samuel, que llegó y comenzó a mostrarle a Elí cómo debía conducirse. Samuel no permitía que ni una palabra de la Biblia de Dios, o de la Biblia que estaba empezando a ser construida, no permitía que ni una palabra se cayera; tanto así tenía hambre y sed de la verdad de Dios, y eso es lo que Cristo nos dijo en Mateo 5 verso 6, que debemos tener hambre y sed de esta verdad. Por esa razón la mayoría de la gente no entiende la Biblia; no tienen hambre y sed del plan de Dios y Sus maravillosas bendiciones y Su maravilloso paraíso. Ellos simplemente no tienen eso, piensan que no es una buena manera de vivir, pero oh, cuánto tienen que aprender. Y el mundo va a tener que aprender eso o no sobrevivirán. Dios tiene que encargarse de eso.

Hoy en día se ven muchos problemas en los que los hijos o las hijas se rebelan contra sus padres. Parece que es algo rutinario actualmente. Pero, ese no es el camino de Dios, ¡y nunca podrá unificarnos si no unificamos a la familia! ¡Y que siga el patrón de la familia de Dios! ¡No dejemos que ninguna de esas palabras caiga al suelo! ¡debemos aferrarnos a estas maravillosas verdades! Dios bendice a Su pueblo en todos los sentidos si Le obedece, ¡y qué modo de vida tan maravilloso, esperanzador y alegre es ese! ¿Por qué alguien lo rechazaría? Bueno, ellos verán por qué dentro de poco, y quiero decir dentro en muy, muy poco tiempo.

Pero repito, qué precioso es eso, pensar que aquí estaba Samuel siendo un adolescente comenzando a entender realmente a Dios, y él iba al templo y se dirigía a Elí, quien todavía estaba a cargo en ese tiempo, y Elí podía ver que Dios estaba trabajando con este adolescente, que Él tenía planes para él, y que iba a reemplazar a Elí y cambiar el curso de Israel, básicamente girando alrededor de esos tres colegios; ¡a cambiar el curso de todo Israel y de gran parte del mundo cuando David entró en escena! Y Samuel tuvo mucho que ver en ayudar a David a llegar allí, y esa también es una historia inspiradora.

Pero Samuel tenía una madre dedicada que estaba tan harta de la época de Elí y de todos los tiempos de los jueces que dijo que si Dios le daba un hijo (ella no podía tener un hijo), ¡Si me das un hijo, lo dedicaré a tu templo durante toda su vida! ¡Y así lo hizo! Y por supuesto ella tenía un esposo que estaba respaldando eso también pero ella realmente tenía una dedicación poderosa a Dios e incluso se volvió una profetisa. Y qué gran madre tuvo Samuel, y vaya que hizo de Samuel un gran profeta. La relación en el plano divino que tenía esa familia, realmente hizo un gran profeta.

Note el verso 20 del mismo capítulo: “Y todo Israel, desde Dan hasta Beerseba, conoció que Samuel era fiel profeta de [el Eterno]”. Ven, hubo una nueva revelación. Ellos sabían que él era un profeta de Dios sobre todo Israel; eso es realmente inusual. Debería ser así hoy porque hemos tenido toda clase de verdad en esta nación. Durante 75 años la verdad de Dios ha sido enseñada a Estados Unidos, a Gran Bretaña y el Estado judío en Oriente Medio; a esas naciones en particular. Dios la hace disponible, pero tenemos que elegir ir por ese camino, y tener esa lámpara en nuestra vida. Samuel mostró el camino.

Hubo un tiempo cuando los filisteos vinieron y atacaron a Israel, y se llevaron el arca que no significaba nada para ellos, aun cuando ahí era de donde Dios hablaba a Israel y así, Israel perdió. Y entonces un tiempo después Dios dice, Ahora si regresan a mí de todo corazón Yo los protegeré. Y los filisteos volvieron a atacarlos e Israel simplemente los masacró, porque Dios estaba con ellos. Dios peleará las batallas por nosotros si confiamos en Él y Su poder, pero necesitamos Su Espíritu Santo para hacerlo. Y podemos darles material que les mostrará exactamente cómo hacerlo.

Entonces, las cosas empezaron a cambiar, y después de todo eso, los israelitas realmente acudieron a Dios por protección, y después que conquistaron a los filisteos, Samuel tomó una piedra —una piedra grande— y la llamó Eben-ezer, que significa “la piedra de ayuda”. Ahora, ¿quién podría ser? ¡necesitamos la piedra de ayuda! ¡Ese es Jesucristo! ¡Él es la Piedra! Él es Aquel que es el Hijo del Padre que nos llamó y nos trajo a Su Iglesia, si es que ahí nos encontramos. Así se hace el proceso; ¡la Piedra de ayuda! ¡Pongan su mente en eso! ¡Tenemos toda clase de ayuda de Dios si tan sólo la escogemos!

Y Dios trató de que Israel viera eso. En ese tiempo ellos no tenían el Espíritu Santo, y realmente no lo entendieron como deberían. Pero hoy deberíamos entenderlo porque Dios ha hecho el Espíritu Santo accesible a todos nosotros, a cada uno de nosotros si lo queremos, pero muy pocas personas lo quieren. Tienen que sufrir más antes de verlo si es así como van a elegir vivir. Dios promete que nos ayudará y nos dará poder con todo Su poder espiritual.

Necesitamos darnos cuenta del trabajo monumental que fue para Samuel porque él levantó estos tres colegios, y literalmente cambió el curso de Israel porque él les enseñó allí principalmente la profecía de Dios, que por supuesto lleva a la Familia de Dios. Él tenía tres colegios que recorría y en los que enseñaba todo lo que podía, y les mostraremos un mapa que ilustra esto. Él tenía tres colegios —uno en Bet-el, y uno en Gilgal, y otro en Mizpa— éstas eran ciudades y él iba a esas ciudades diferentes, y enseñaba a esos hombres jóvenes, mayormente; yo creo que todos solamente hombres porque era un tiempo tan desastroso en Israel. Y ellos sólo llamaron a los hombres para poder levantar ministros y personas que ayudarían a hacer la Obra de Dios. Y pienso que ellos no tenían un colegio de Artes Liberales, como tenemos hoy. Tenemos hombres y mujeres porque así es como Dios realmente lo quiere, pero en el tiempo de Samuel no creo que tuvieran ese lujo porque era tan difícil. Pero ha sido mucho más fácil en este tiempo final, hasta ahora. Pero tenemos que poner nuestras vidas en las manos de Dios.

Sólo quiero mostrarles esta compañía de profetas y cómo salieron y profetizaron. Pero también quiero mostrarles que una gran porción de la Biblia está en poesía. Y quería leerles algo que Anna Ackmatova dijo sobre su amigo, Mandelshtam, ellos dos grandes poetas. Y Stalin exaltó a Mandelshtam y lo puso en una pequeña ciudad donde no podría hacer ningún daño y estando cercano a la muerte ella lo visitó. Y después de la visita (ella sabía que él estaba cerca de la muerte), ella dijo lo siguiente: “En la habitación del poeta exiliado, el miedo y la musa se turnan la guardia, y la noche es interminable y no conoce el amanecer”. Esa es una poesía poderosa, un trozo de ésta al menos. “… Y la noche es interminable y no conoce el amanecer”. Así son las cosas durante 6.000 años en este mundo; así ha sido. ¡Pero qué triste, qué negativo y qué horrible es eso! ¡Pero encontrarán poesía en la Biblia más poderosa que esa! Y hombres hablaron así.

¿Recuerdan a Winston Churchill? Él hablaba en poesía, ¡y era uno de los mejores oradores de todos los tiempos! Y la poesía puede hacer que sus mensajes sean mucho más poderosos y profundos, así que tenemos que aprender sobre poesía. El año que viene vamos a dar una clase sobre eso aquí en nuestro colegio.

De todos modos, algunas de las poesías más hermosas que hayan escuchado en su vida están ahí mismo en la Biblia, y no tengo tiempo para entrar en ello. Pero les diré, necesitamos aprender esta Biblia y darnos cuenta que Dios educó a Su pueblo mucho más que otras personas en el mundo. Les digo, ¡Él realmente lo hace! Dios les da educación que les muestra cómo resolver los problemas del mundo, y como resolver sus propios problemas, y construir el carácter mismo de Dios, para que los primeros frutos puedan sentarse en el trono de David con Jesucristo por los siglos de los siglos. Y entonces, después de eso ellos ayudarán a Dios a traer al mundo entero a Su Familia, o al menos a aquellos que lo deseen.