Estados Unidos en la encrucijada

Estados Unidos se encuentra en un momento crítico.

Durante años, nuestra nación ha sufrido crisis monstruosas. Hemos sido testigos de ataques a nuestra Constitución, de división política, de unas elecciones robadas, de intentos de asesinato y del asesinato de opositores políticos. Hemos visto la inmigración ilegal devastando nuestras ciudades y a los terroristas matando a nuestros seres queridos.

Hemos sido testigos de ataques contra nuestras familias, nuestro recurso más preciado. El matrimonio ha sido redefinido. Los niños han quedado marcados de por vida por el transgenerismo y la cultura progresista. Decenas de millones de nuestros hijos no nacidos han sido asesinados en clínicas de aborto.

En medio de estos horribles males, muchas personas han estado clamando a Dios.

Lo que hemos visto es la aflicción profetizada en 2 Reyes 14:26: “Porque [el Eterno] miró la muy amarga aflicción de Israel; que no había siervo ni libre, ni quien diese ayuda a Israel”. El antiguo Israel fue el antepasado de varias naciones modernas, la principal de las cuales es EE UU. Israel se refiere aquí proféticamente a EE UU. (Solicite Estados Unidos y Gran Bretaña en profecía para comprobarlo).

¿Qué hizo Dios respecto a esa aflicción? “Y [el Eterno] no había determinado raer el nombre de Israel de debajo del cielo; por tanto, los salvó por mano de Jeroboam hijo de Joás” (versículo 27). Esta es una profecía acerca de un líder de los últimos tiempos en EE UU, a quien Dios utiliza para detener esa aflicción. Como explico en mi libro Estados Unidos bajo ataque, este líder es el presidente Donald Trump (solicite su ejemplar gratuito).

El presidente Trump habla de salvar a Estados Unidos. Pero no es él quien salva a este país, sino Dios, “por mano de” este hombre.

En muchos sentidos, la aflicción causada por administraciones anteriores ha sido controlada. Sin embargo, las maldiciones sobre EE UU continúan. El odio, la división y la violencia que Satanás el diablo está provocando y fomentando siguen en ebullición. Y sucesos impactantes como el asesinato de Charlie Kirk en Utah demuestran que están empeorando.

Kirk tenía 31 años. Era un destacado conservador y partidario del presidente Trump. Era un hombre religioso y luchó contra muchas de las maldiciones que han asolado a EE UU. Algún demente pensó que eso era motivo suficiente para asesinarlo a plena luz del día.

Por horroroso que fuera el asesinato, más horroroso aún fue que personas demoníacamente celebraran el homicidio de Kirk. ¡Esto demuestra lo enferma que está nuestra sociedad!

La evaluación de Dios sobre EE UU es que somos una “gente pecadora, pueblo cargado de maldad”. Toda la “cabeza está enferma, y todo corazón doliente” (Isaías 1:4-5). Este no es un mensaje popular. Pero debemos llegar a ver esta realidad como lo hace Dios. EE UU está tan enfermo que debemos darnos cuenta de que sólo Dios puede curarnos.

Cada vez más personas buscan respuestas. Tras el asesinato de Kirk, millones de estadounidenses se hacen preguntas importantes. Algunos incluso buscan arrepentirse de aquello que ha conducido a estas horribles maldiciones. Desean sinceramente que se cure la enfermedad que aqueja el corazón de EE UU. Algunos han recurrido a la Biblia en busca de respuestas. Muchos acuden a las Iglesias en busca de orientación.

EE UU se encuentra en una encrucijada. Nuestros próximos pasos determinarán adónde conduce este resurgimiento religioso. ¿Llevará a la nación hacia Dios, o permaneceremos en los miserables pecados que han causado nuestros enormes problemas?

La Biblia revela hacia dónde nos dirigimos. Y Donald Trump está desempeñando un papel fundamental. ¿Qué dice la Biblia sobre seguirlo a él y a su religión?

Resurgimiento religioso

Al servicio conmemorativo de Charlie Kirk asistieron decenas de miles de personas en un estadio abarrotado y millones más lo vieron a través de la Internet. Se convirtió en un acontecimiento profundamente religioso para millones de estadounidenses y resonó en todo el mundo.

“Aunque el evento tuvo sus notas discordantes, el tema principal fue similar a un renacimiento religioso, una reminiscencia de las cruzadas en tiendas de campaña de Billy Graham de las décadas de 1930 y 1940 o el ‘gran despertar’ del siglo xix”, escribió la bbc. “El servicio conmemorativo celebró el cristianismo de Charlie Kirk y prometió un nuevo entusiasmo entre los jóvenes estadounidenses por los valores tradicionales con un fervor evangélico” (22 de septiembre).

Kirk promovió leer y seguir de la Biblia. Abogó por familias fuertes basadas en la instrucción bíblica. Él guardaba el Sábado [o reposo] del séptimo día. Estos puntos son realmente dignos de elogio. Las personas que los sigan se darán cuenta de que sus vidas serán mucho mejores gracias a ello.

El presidente Trump habló en el servicio conmemorativo de Kirk, pero no dijo mucho sobre religión. Ha pasado toda su vida confiando en sus propias habilidades. Incluso en medio de estas terribles maldiciones, esto no ha cambiado. Sin embargo, él también ve que la gente anhela la religión. Por eso reúne a líderes religiosos a su alrededor.

Esto va a conducir al cumplimiento de una profecía crítica en Amós 7 que he explicado durante años. Se profetizó que el presidente Trump lideraría un resurgimiento religioso, pero en lugar de guiar a las personas hacia Dios, está haciendo que las personas lo miren a él.

La religión de Trump

En 2016, Donald Trump obtuvo más del 80% de los votos de los evangélicos blancos y una gran parte de los católicos. Lideraba a la mayoría de las personas “religiosas” de EE UU. Pero como pregunté en aquel momento, “¿Hacia dónde los está llevando?”.

¡Necesitamos a un líder que guíe a nuestro pueblo hacia el Dios vivo y no hacia un hombre insignificante e indefenso!

Cuando estaba haciendo campaña presidencial en 2015, le preguntaron al Sr. Trump si alguna vez le había pedido perdón a Dios. “No estoy seguro de haberlo hecho”, respondió. “Simplemente sigo adelante e intento hacerlo mejor a partir de ahí. (...) Creo que si hago algo mal, creo que simplemente intento corregirlo. No meto a Dios en eso. No lo hago”.

¡Eso es lo contrario de llevar a la gente hacia Dios! De hecho, ¡este razonamiento es la razón por la que nuestro mundo está sufriendo maldiciones tan horribles!

Desde el momento en que Adán y Eva eligieron comer del árbol de la ciencia del bien y del mal, la gente ha dejado a Dios fuera de la ecuación, ¡y vean los horribles resultados en nuestro mundo actual!

En una entrevista posterior con cnn, Trump añadió: “Tengo una gran relación con Dios. (...) Me gusta ser bueno. No me gusta tener que pedir perdón. Y soy bueno. No hago muchas cosas que son malas. Intento no hacer nada malo” (17 de enero de 2016).

El presidente Trump ha dicho: Yo haré a EE UU grande otra vez”. Yo haré a EE UU grande —no Dios— como me hice grande a mí mismo. ¡Esa actitud va a marcar el comienzo del desastre! Los hombres piensan en vano que pueden hacer cosas magníficas. ¡Ese es uno de los pensamientos más engañosos que alguien puede tener!

Este mismo razonamiento atormentó a los reyes del reino del norte de Israel tras haberse separado de Judá en la antigüedad.

Un paralelo histórico

El rey Jeroboam i era un hombre “valiente” y “esforzado” (1 Reyes 11:28). Pero acabó siendo un desastre para Israel, alejando al pueblo de Dios al institucionalizar la religión falsa (1 Reyes 12).

El libro de Reyes forma parte de lo que se denomina los profetas anteriores, y es profecía principalmente para este tiempo del fin. (Solicite un ejemplar gratuito de mi libro Los profetas anteriores: cómo llegar a ser un rey. En él se explica la relevancia de estos libros bíblicos para nosotros hoy).

Después de que Jeroboam irecibiera el gobierno de las 10 tribus del norte de Israel, ¿qué hizo? Él temía que el pueblo regresara a la casa de David, por lo que construyó un centro de culto alternativo (1 Reyes 12:25-26). Acababan de separarse y quería mantenerlos separados del trono del rey David. Dios le había explicado a Jeroboam la importancia de la casa de David (1 Reyes 11:29-39), pero él rechazó la instrucción de Dios.

Este hombre era vanidoso y carecía de confianza en Dios. El presidente Trump haría bien en prestar atención a esta lección.

El rey Jeroboam temía que la gente recurriera a Dios en lugar de recurrir a él. Razonó: “Si este pueblo subiere a ofrecer sacrificios en la casa de [el Eterno] en Jerusalén; porque el corazón de este pueblo se volverá a su señor Roboam rey de Judá [el hijo de Salomón], y me matarán a mí, y se volverán a Roboam rey de Judá. Y habiendo tenido consejo, hizo el rey dos becerros de oro, y dijo al pueblo: Bastante habéis subido a Jerusalén; he aquí tus dioses, oh Israel, los cuales te hicieron subir de la tierra de Egipto” (1  Reyes 12:27-28). Jeroboam los condujo de regreso a los dioses falsos que ellos habían adorado después de que escaparon de Egipto y se rebelaron contra Dios y Moisés (Éxodo 32).

Jeroboam entonces contaminó el sacerdocio al ordenar sacerdotes de “entre el pueblo, que no eran de los hijos de Leví” (1 Reyes 12:31). Cambió las fechas de los días santos de Dios de como eran bajo David y en Jerusalén (versículos 32-33). Tenía su propio plan de días santos, su propio “plan maestro”. Manipuló el sistema para poder dirigir al pueblo y mantenerlo alejado de la casa de David. Ese fue su gran pecado. Lamentablemente, el pueblo se dejó llevar.

¡Este mismo pecado se está cometiendo hoy! El Jeroboam moderno lucha por muchas causas buenas. Pero en el proceso hace que la gente lo vea a él como la solución, ¡no al Dios omnipotente y todopoderoso!

Esto va a terminar de la misma forma que en la antigüedad.

Santuario del rey

En febrero, Trump anunció la creación de una Oficina de la Fe en la Casa Blanca. ¿A quién nombró para dirigir la fe de EE UU? A Paula White, una televangelista estadounidense vinculada al movimiento pentecostal y al evangelio de la prosperidad. White se ha casado tres veces y ha enfrentado graves acusaciones de infidelidad conyugal. Sus prédicas omiten verdades bíblicas esenciales sobre el pecado, el arrepentimiento y la búsqueda de la santidad.

En una ocasión, White dijo en una conferencia de mujeres en la Florida: “Cualquiera que les diga que se nieguen a sí mismas es de Satanás”. Eso contradice directamente la instrucción de Jesús de “negarse a sí mismo y seguirlo” (Mateo 16:24). Muchos cristianos reconocen que el “evangelio” comercializado de White tiene poco que ver con la Biblia. En una de sus estrategias más recientes de dinero a cambio de bendiciones, ella prometió que quien donara 1.000 dólares a su ministerio antes de la Pascua, recibiría “siete bendiciones sobrenaturales”, incluyendo un ángel guardián, prosperidad, curación y una larga vida. ¡Este no es el tipo de líder religioso que instaría a nuestra nación a un arrepentimiento genuino!

Se puede estudiar la vida de casi cualquier líder religioso popular y encontrar mucha inmoralidad y doctrinas falsas.

Amós 7 profetiza sobre lo que ocurre cuando Dios envía un profeta a esos líderes religiosos.

El rey Jeroboam ii siguió los pasos de Jeroboam i y fue el último rey israelita en recibir una advertencia de Dios antes de que la nación cayera en cautiverio. Él se negó a escuchar la advertencia de Dios.

Amós 7 habla de este Jeroboam, pero la profecía es para nuestros días.

En los versículos 12-13, parece que Jeroboam le ha ordenado a su consejero espiritual que le diga al siervo de Dios: “Vidente, vete, huye a tierra de Judá, y come allá tu pan, y profetiza allá; y no profetices más en Bet-el, porque es santuario del rey, y capital del reino”.

Observe que se trata del “santuario del rey”, un lugar de culto religioso que ve hacia un rey humano, ¡no hacia Dios!

El versículo 9 contiene más imágenes religiosas. Dios advierte: “Los lugares altos de Isaac serán destruidos, y los santuarios de Israel serán asolados, y me levantaré con espada sobre la casa de Jeroboam”.

Los “lugares altos de Isaac” hacen referencia a la propia Iglesia de Dios que se ha vuelto espiritualmente tibia (Apocalipsis 3:14-20). Los “santuarios de Israel” son las religiones de este mundo, como los evangélicos. (Esto se explica en mi folleto gratuito sobre Amós, El león ha rugido).

¡Dios tiene una advertencia contra la gente religiosa de nuestros días! No basta con rechazar el transgenerismo y otros males de la sociedad. ¡Dios nos está diciendo que hay algo terriblemente erróneo en nuestra religión ! 

Los estadounidenses buscan respuestas; muchos buscan a Dios. Pero algo falla en la mayoría de las religiones actuales, incluso en las que afirman seguir la Biblia y entender a Dios.

Aquí hay un ejemplo. Charlie Kirk observaba el Sábado del séptimo día. Dios nos manda a guardar este día (Éxodo 20:8-11). ¿Pero ha visto a los asesores espirituales del presidente abordar este tema? No. ¡Prefieren enterrarlo porque condena su religión y a toda nuestra sociedad!

Observe detenidamente este pasaje de Amós 7 y podrá ver algo profundamente preocupante en los consejeros espirituales de Jeroboam.

El versículo 10 menciona que “el sacerdote Amasías de Bet-el” estaba del lado del rey. “Bet-el” significa casa de Dios. Amasías debe ser un líder religioso que provino de la Iglesia de Dios de este tiempo del fin.

Sin embargo, este sacerdote de Betel está luchando al lado de Jeroboam contra el profeta de Dios, específicamente, ¡contra el mensaje de Dios entregado por el profeta de Dios! ¡Algo está terriblemente mal!

Yo creo que el sacerdote Amasías es el mismo hombre que estaba al mando de la Iglesia de Dios contra la cual luchamos por los derechos de autor de la verdad y el mensaje de Dios. (Lea sobre esa batalla judicial en El león ha rugido).

Si estos son los líderes religiosos a los que acuden nuestro presidente y nuestro país, entonces este actual resurgimiento religioso no logrará que nuestro pueblo se acerque más a Dios. De hecho, ¡llevará a EE UU a la rebelión contra Dios y Su mensaje!

Rechazan la advertencia de Dios

El tema principal de Amós 7 es el mensaje de Dios que Jeroboam y el “santuario del rey” rechazan.

“Entonces el sacerdote Amasías de Bet-el envió a decir a Jeroboam rey de Israel: Amós se ha levantado contra ti en medio de la casa de Israel; la tierra no puede sufrir todas sus palabras” (versículo 10).

Aquí Amasías está acusando a Amós, el verdadero profeta de Dios, de traición, “se ha levantado contra ti” Jeroboam. Amós representa al hombre de este tiempo del fin que proclama hoy el mensaje de advertencia de Dios a Israel. Esta es una profecía de un enfrentamiento real entre un falso ministro y un verdadero profeta de Dios.

¿Qué es lo que Amasías odia tanto del mensaje de Amós? Tiene mucho que ver con la profecía bíblica.

Nuestros líderes religiosos y políticos rechazan hoy la profecía bíblica porque los condena. No quieren oír lo que Dios tiene que decir sobre el pecado de la nación y hacia dónde la está llevando. Por eso dicen: “No profeticéis” (Amós 2:12).

¡Al rechazar la profecía, rechazan la revelación más profunda de la Biblia, que revela el evangelio y nuestro increíble potencial humano!

Uno de los libros por los que luchamos en los tribunales fue Estados Unidos y Gran Bretaña en profecía, del difunto Herbert W. Armstrong. Este libro revela la identidad del antiguo Israel y cómo se preservó el trono de David a través de los años, y abre el entendimiento a toda la profecía bíblica y a la Llave de David (Apocalipsis 3:7). Esta espectacular visión trata de la intervención divina de Jesucristo para poner fin al engaño de Satanás sobre el mundo y tomar control del gobierno (Apocalipsis 12:9; 11:15).

Mientras observa este resurgimiento religioso en EE UU, realmente necesita estudiar la Biblia para discernir lo que está sucediendo. ¡Esto está conduciendo a la confrontación profetizada entre la religión falsa y la religión verdadera!

¿Puede usted reconocer la diferencia? ¿Conoce bien su Biblia? ¿Puede ver quién está verdaderamente dispuesto a someterse humildemente al gobierno de Dios y proclamar el mensaje de Dios sin importar la oposición?