El nuevo canciller de Alemania hace de la militarización una prioridad máxima

En su primer discurso como canciller alemán el 14 de mayo, Friedrich Merz declaró que fortalecer la Bundeswehr alemana sería la “prioridad máxima” del gobierno. Incluso antes de asumir el cargo, Merz impulsó una reforma para eximir el gasto militar por encima del 1% de los límites de deuda nacional. Su discurso confirma las nuevas ambiciones del gobierno.

En el futuro, el gobierno federal proporcionará todos los recursos financieros que la Bundeswehr necesite para convertirse en el ejército convencional más fuerte de Europa. Esto es más que apropiado para el país más poblado y económicamente más fuerte de Europa. Nuestros amigos y socios también esperan esto de nosotros y, lo que es más, en realidad lo están exigiendo.
—Friedrich Merz

Con respecto al discurso, Bild escribió: “Probablemente sea la frase más importante en la política de defensa alemana en décadas, si no desde la fundación de la República Federal de Alemania. (…) Las fuerzas armadas alemanas, que están parcialmente descompuestas y han estado infra-financiadas durante mucho tiempo, que aún necesitan urgentemente personal, deben convertirse en las ‘más fuertes de Europa’. Más fuertes que las francesas, británicas y polacas. ¡Una tarea desafiante!”

En principio, los parlamentarios alemanes ya han acordado priorizar el gasto en defensa. Pero Merz está persiguiendo esto con mayor urgencia, más claridad y recursos adicionales. “Sabemos que necesitamos mejorar urgentemente la preparación operativa y el crecimiento del personal de nuestra Bundeswehr”, dijo.

El alto comandante militar alemán, el general Carsten Breuer, recientemente cuantificó esta afirmación. Dijo a una audiencia en el Consejo Alemán de Relaciones Exteriores en abril que Alemania necesita 100.000 tropas adicionales “inmediatamente—y lo más rápido posible”. Junto con los cientos de mil millones en fondos adicionales y la promesa de desregular la adquisición, esto daría un gran impulso a la Bundeswehr.

El jueves, el ministro de relaciones exteriores, Johann Wadephul, confirmó que Alemania tiene como objetivo aumentar su gasto militar al 5% del producto interno bruto, como lo exige el presidente de Estados Unidos, Donald Trump. Esto significa gastar alrededor de 250 mil millones de dólares en defensa.

Esto representa un cambio drástico respecto al gobierno anterior liderado por el demócrata Olaf Scholz, quien también puso un mayor énfasis en los asuntos militares. Pero para algunos, todavía no es suficiente. Dado que el Partido Socialdemócrata (spd, por sus siglas en alemán) sigue formando parte del gobierno y ha mostrado una tendencia a apaciguar al presidente ruso Vladimir Putin, hay dudas sobre si Merz podrá realizar sus ambiciones en una coalición que los incluye. Frankfurter Allgemeine Zeitung escribió:

Cuando se trata de Rusia, los viejos reflejos aún son evidentes en las filas del spd. Merz no tiene ilusiones sobre la naturaleza e intenciones de Putin. A diferencia de Scholz, Merz también desea aceptar la reciente oferta repetida de Macron para discutir la extensión del paraguas nuclear francés a Alemania. Si la Bundeswehr ha de convertirse en el ejército convencional más fuerte de Europa, entonces también habría sido necesario reactivar el servicio militar obligatorio. No sólo aumentaría la capacidad de defensa, sino que también haría más evidente para los jóvenes alemanes que muchas otras cosas: Todos nosotros somos el Estado.

Aunque Alemania aún no ha superado todos los obstáculos para militarizarse, es asombroso que prácticamente todos crean que cuanto más lo haga, mejor.

La mayoría de los europeos han exigido durante mucho tiempo que Alemania intensifique sus esfuerzos militares para aumentar la disuasión de Europa. Mientras Alemania alguna vez fue vista como un lobo entre ovejas, ahora es vista como un pastor alemán protector.

Como el redactor jefe de la Trompeta, Gerald Flurry señaló en nuestro último número de la Trompeta, prácticamente nadie parece estar preocupado:

En marzo, Alemania aprobó un cambio constitucional histórico que le permite pedir dinero prestado y gastar cientos de miles de millones en infraestructuras y armamento. Los estadounidenses y otras personas cuyos abuelos lucharon y murieron a causa del armamento alemán ahora aplauden este acontecimiento. Ellos son ajenos a los sentimientos de venganza que hierven en lo profundo de muchos alemanes.

[Winston] Churchill vio a los fabricantes de automóviles alemanes y otras industrias cambiar hacia la producción de armas. Ahora estamos viendo lo mismo. La autopista del país es más que un símbolo de velocidad: forma parte de sus planes estratégicos de movilización militar. Se están realizando inversiones para convertir todo el paisaje alemán en un campo listo para la batalla.

Alemania está repitiendo las acciones de la década de 1930, ¡sin que nadie se alarme!

La Trompeta ha advertido durante décadas sobre cada movimiento hacia la militarización alemana. Pero nunca hemos visto a un canciller dispuesto a hacer de la militarización alemana una prioridad máxima, hasta ahora.

Incluso cuando las superpotencias del mundo al final de la Segunda Guerra Mundial, prometieron nunca dejar que Alemania resurgiera, Herbert W. Armstrong advirtió que resurgiría de nuevo. Él repitió esta misma advertencia hasta el final de su vida. En la revista La Pura Verdad de abril de 1980, escribió:

¡Puede estar seguro de que los líderes de Europa Occidental están confiriendo apresuradamente y en secreto sobre cómo y cuán pronto pueden unirse y proporcionar una fuerza militar europea unida para poder defenderse! ¡Y así ya no tendrán que rendirse dócilmente a Rusia! ¿Y a quién culparán por su humillación y su necesidad ahora de tener una Europa unida, con un gobierno unido, una moneda común y una fuerza militar común tan grande o más grande que la urss o EE UU? ¡Ellos culparán a Estados Unidos!

La Trompeta hoy sigue sonando la misma alarma, no sólo por la historia de Alemania sino por la profecía bíblica. El libro de Apocalipsis advierte sobre el ascenso repetido de un imperio militar que llevará a nuestro mundo cerca de la destrucción absoluta. Cuando esta potencia militar es fuerte, la gente preguntará: “¿Quién como la bestia, y quién podrá luchar contra ella?” (Apocalipsis 13:4).

El momento se acerca en que el poder militar alemán al mando de un imperio europeo volverá a infundir miedo en la gente. Este Imperio causó los horrores de la Segunda Guerra Mundial. Incluso cuando el mundo vio la destrucción de este mismo Imperio, el Sr. Armstrong vio las primeras etapas de su resurgimiento. Hoy, ese imperio militar está casi completamente rehabilitado. Para entender por qué seguimos proclamando la advertencia del Sr. Armstrong, lea el artículo del Sr. Flurry “El asombroso ascenso militar de Alemania”.