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La Trompeta

El misterio de Israel (transcripción)

Saludos a todos.

¿Sabía usted que la Biblia es un libro acerca de Israel? No obstante, Israel es un misterio total a las religiones del mundo. Eso es algo asombroso, pero es verdad; y usted necesita también darse cuenta de que no puede siquiera entender el propósito del hombre a menos que entienda la verdad acerca de Israel. Pues, usted puede comprobar esto, no estoy diciendo cosas que no pueden ser comprobadas. Tampoco usted no puede alcanzar su increíble potencial humano si no entiende la verdad acerca de Israel. Entonces me gustaría animarlo a que vea en esto más de cerca que lo que ha hecho antes.

¿Se preguntó alguna vez por qué Dios levantó a Israel? Y Dios no hace acepción de personas, ¿pero Él hace acepción de naciones? ¿Es Él un ser que tiene un favorito? Pues bien, éstas son muchas preguntas que necesitábamos responder. Y también, ¿sabía usted que Dios ni siquiera le ofreció salvación a Israel antigua, excepto por los profetas? Él ni siquiera ofreció eso a ellos.

Y aquí hay otra cosa asombrosa: ¡el reino del norte de Israel no era judío! Usted puede ver a II de Reyes 16, versículo 6 y ver que la primera vez que la palabra judío se menciona, ¡ellos están en guerra contra Israel! ¿Cómo se explica esto?

Pues yo he estado haciendo una serie de programas en el libro del Sr. Armstrong: El misterio de los siglos, y los siete misterios son: ¿quién y qué es Dios?, ése es un misterio al mundo; y el misterio de los ángeles y los espíritus malignos, el número dos; número tres, el misterio del hombre; número cuatro, el misterio de civilización; número cinco, el misterio de Israel; número seis, el misterio de la Iglesia, ¡es un misterio!; y el misterio del Reino de Dios.

Ahora, quiero hablar acerca del misterio de Israel, ése es el quinto misterio. Y voy a comenzar a hablando acerca de Abraham o Abram, como se le llamaba antes que fuera convertido. Pero él fue llamado ‘el padre de los fieles’. Fíjese en Génesis 12, versículos 1 y 2, dice: “Vete de tu tierra y de tu parentela, y de la casa de tu padre, a la tierra que te mostraré. Y haré de ti una nación grande”.

Entonces Dios hizo esta maravillosa promesa a Abraham, que le iba a hacer una gran nación. Y Él empezó Israel con un solo hombre, así como Él comenzó a la humanidad con un solo hombre.

Pero aquí Abraham era el patriarca de Israel. Ésa era la congregación o la Iglesia del Antiguo Testamento. Pero la congregación física de Israel bajo el Antiguo Testamento realmente es un tipo de la Israel del Nuevo Testamento o, es decir, la Iglesia de Dios. Y usted puede encontrar ese principio de dualidad en toda la Biblia. El Antiguo Testamento es simplemente un precursor o un tipo del Nuevo Testamento y lo que pasa en ese tiempo.

Y en Isaías 43, versículo 21 dice: “Este pueblo he creado para mí; mis alabanzas publicará”. Pues, ése fue el plan de Israel para realmente mostrar Su alabanza, publicarla y mostrarle al mundo como obedecer a Dios y recibir una multitud de bendiciones que Dios promete si uno Le obedece. Y repito, usted encuentra esta dualidad aquí en Abraham como la encontramos en el primer Adán, un hombre material y carnal; y el segundo Adán Jesucristo es espiritual y divino. Y hay el Antiguo Pacto y luego el Nuevo Pacto. ¡Todo esto es dualidad! Hay dualidad en las dos fases de las promesas que Dios le hizo a Abraham: una era puramente material y nacional, la otra espiritual e individual. Aquí estaba el padre de los fieles. Eso incluye gentiles, israelitas, todos, si es que tienen fe en Dios. Espiritualmente hablando, toda la humanidad va a volverse Israel; y esto es algo que mucha gente no entiende.

Pero el apóstol Pablo fue un apóstol a los gentiles. Esto está en Romanos 11, versículo 13. Pero vea en el versículo 17, se lo voy a leer: “Pues si algunas de las ramas fueron desgajadas, y tú, (los gentiles) siendo olivo silvestre, has sido injertado en lugar de ellas, (es decir, Israel) y has sido hecho participante de la raíz y de la rica savia del olivo”.

Los gentiles espiritualmente se vuelven parte de Israel.

Usted puede ver en Romanos 2, versículos 28 y 29, dice: “Pues no es judío el que lo es exteriormente… sino que es judío el que lo es en lo interior…”.

Usted puede encontrar en la última era de la Iglesia de Dios, en Apocalipsis 3, versículo 7 que habla acerca de la era Filadelfia; y después continúa en el versículo 9 diciendo que hay algunos que le dieron la espalda a la Iglesia de Dios, “… la sinagoga de Satanás a los que se dicen ser judíos y no lo son, sino que mienten…”.

Entonces la lección ahí es que de todos nos convertimos en judíos espirituales cuando nos convertimos al modo de vida de Dios.

Pero quiero regresar a Israel antigua y mostrarle algo aquí. Versículo 5 y 6 de Éxodo 19: “Ahora, pues, si diereis oído a mi voz, y guardareis mi pacto, vosotros seréis mi especial tesoro sobre todos los pueblos; porque mía es toda la tierra. Y vosotros me seréis un reino de sacerdotes, y gente santa. Estas son las palabras que dirás a los hijos de Israel”.

Pues, ellos eran para ser un reino de sacerdotes. Ellos debían de enseñarle al mundo acerca de Dios, si es que el mundo estaba deseoso de recibir esa enseñanza y la aceptaba. También eran una nación santa, todo esto en el nivel carnal. No tenían el Espíritu Santo de Dios, pero era por la letra de la ley; y ésa era una forma maravillosa de vivir, la mejor forma que uno puede posiblemente vivir si no tiene el Espíritu Santo de Dios. Pero fue diseñado, como ven, para traerle prosperidad y un nivel carnal de paz en Israel. Pero fíjese en lo que sucedió. Voy rápidamente a leer esto, Éxodo 19, versículo 8: “… Todo lo que Jehová ha dicho, haremos…”.

Pues eso es lo que Israel le dijo a Dios, ¿pero lo hicieron? ¿Hicieron de la forma como dijeron que lo harían? Pues no.

Ahora veremos a Jeremías 3, versículo 20 donde dice: “Pero como la esposa infiel abandona a su compañero, así prevaricasteis contra mí, oh casa de Israel, dice [el Eterno]”.

¡Entonces vea pues eso! Ellos simplemente no dieron la medida de lo que Dios quería que hicieran y lo que ellos dijeron que harían. Pero esta nación de Israel fue la nación de Dios; y Dios estaba ahí, ellos podían apelar y acudir a Dios y Él les dio Su Iglesia. Todo era en un nivel físico, ellos no eran una nación espiritual, ¿por qué Dios hizo todo eso? ¿Cuál era el propósito de hacer todo eso? Quiero mostrárselos porque es una de las verdades más asombrosas de la Biblia. No obstante, sólo unos pocos lo entienden; y usted puede comprobarlo para sí mismo. Pero simplemente piense acerca de esta gente que tenía todos estos milagros espectaculares que Dios les mostró, el Mar Rojo y que caminaron como en tierra seca entre estos dos muros de agua; y después cuando el ejército egipcio siguió detrás de ellos, esos muros colapsaron y ahogaron a todo ese ejército. Ése es un milagro tan grande que uno pensaría, ¡pues ellos pudieran hacer cualquier cosa si vieran un milagro como ése! ¡Pero no fue el caso! Ellos estaban quejándose poco tiempo después acerca de ciertas cosas que no les gustaban. Y si usted va al monte Sinaí, vea lo que sucedió ahí. La montaña estaba como en fuego y había rayos y truenos y estaba estremeciéndose cuando los Diez Mandamientos fueron dados, ¡y la gente estaba muy asustada! ¡Pero qué milagro tan grandioso fue!

¡El sol se quedó detenido en el firmamento en el tiempo de Josué! ¿Qué tipo de milagro es ése? Y una y otra vez derrotaron sus enemigos por diversos modos. A veces Dios enviaba avispas ante ellos para pues ahuyentar al enemigo. Esto es asombroso cuando uno piensa acerca de todos los milagros que Dios hizo.

Pero déjeme leerle algo aquí, espero que usted escuche de cerca porque es una verdad fundamental de la Biblia que usted necesita entender si es que va a entender por qué la antigua Israel y por qué Dios puso a Israel con todo esto. Pues, ésta es la razón, es una cita del libro El misterio de los siglos: “Ahora Dios decidió que les daría conocimiento de Su ley, de Su tipo de gobierno, ¡de Su modo de vivir! Iba a demostrar al mundo que sin Su Espíritu Santo la mente humana es incapaz de recibir y utilizar el conocimiento del verdadero camino de vida. Iba a demostrarles que la mente del hombre, con su espíritu humano únicamente y sin el Espíritu Santo de Dios agregado, no puede tener discernimiento espiritual, no puede resolver los problemas humanos ni eliminar los males que acosan a la humanidad. La nación de Israel sería Su “conejillo de Indias” para demostrar este hecho”.

¿Quieren ustedes saber por qué el hombre no puede resolver sus problemas? Pues, ahí mismo lo dice.

Y esta gente tenía a Dios dirigiéndolos si ellos se Lo permitieran. Pero ésta era Su nación y Él hizo un pacto con ellos, el Antiguo Testamento, el Antiguo Pacto, ¡un pacto de matrimonio!, ¡hablando de intimidad! Dios realmente la tenía con Israel si solamente ellos se la permitieran. Dios era su esposo y ellos estaban casados a Él; tenían un matrimonio de Antiguo Pacto; ¡y aun así fallaron! ¿Cómo se explica eso? A menos que usted entienda que no tenían el Espíritu Santo de Dios, excepto los profetas. ¡La gente no lo tenía! Dios no les ofreció salvación. Él quería probarle al mundo lo que el Señor Armstrong dice aquí. ¿Pero entendemos nosotros eso? Si solamente lo piensa y medita parece que todas las condiciones estaban perfectas, excepto que no tenían el Espíritu Santo de Dios.

El Sr. Armstrong fue por muchos lados y conoció a más líderes mundiales quizás que ninguna otra persona cuando él vivió, especialmente en la última década de su vida. Y él dijo que él se entrevistó con emperadores, gobernadores, reyes y gente de ese tipo; y ellos le admitieron y confesaron que los problemas que tenían en sus naciones no podían ser resueltos por seres humanos. Ésa es una verdad asombrosa que nosotros debemos entender después de toda esta historia que hemos tenido. ¡Pero esos problemas son de una naturaleza espiritual y solamente pueden resolverse espiritualmente!, Es lo que el hombre no entiende.

Una cita más del Señor Armstrong, “¡Las décadas y siglos que transcurrieron en la antigua Israel lo demostraron!”

O sea, ¡la mente carnal no puede resolver sus problemas!

“A Israel (Dios) le dio Sus estatutos y juicios, así como Su ley espiritual. ¡Pero sin el Espíritu Santo de Dios, estas leyes perfectas no resolvieron los problemas de la nación! Dios pudo haber dicho sencillamente: ‘Yo soy Dios. Créanme’. ¡Pero Él demostró por medio de Israel que sin el Espíritu Santo el hombre es totalmente incapaz! (¡el hombre es incapaz!). Los israelitas podían, incluso, apelar a Dios”.

¡Y aun así ellos fallaron! ¡Tiene que haber una razón para eso! ¿Es la culpa de Dios? No, no es. ¡Dios es perfecto! ¡No es la culpa de Dios! Pero ellos comprobaron por la experiencia, que el hombre sin el Espíritu Santo en él no puede ser recto, justo. ¡Y es totalmente incapaz! Y esto es lo que no hemos aprendido hoy.

¡Vean lo que estamos enfrentando! ¡Nuestro problema número uno es la sobrevivencia humana, Y el hombre no tiene una solución! ¡Está más allá de poderlo resolver para el hombre! Debemos de entender eso.

Fíjese en Génesis 12 y versículo 1, déjeme leer esto con un versículo añadido. Éste es versículo 1 de Génesis 12: “Pero [el Eterno] había dicho a Abram: Vete de tu tierra y de tu parentela, y de la casa de tu padre, a la tierra que te mostraré. Y haré de ti una nación grande [una RAZA – y luego dice:] (…) y serán benditas en ti todas las familias de la tierra”.

¡Eso es gracia!, ¡salvación a toda la humanidad! Es una promesa de que eso vendría por medio de Abraham también. Bueno, si uno habla acerca de una nación, uno está hablando de una raza. Pero si está hablando de todas las familias de la Tierra, pues ahí estamos hablando acerca de la gracia que se les da a ellos.

Génesis 22 y versículo 18 dice: “En tu simiente serán benditas todas las naciones de la tierra…”. Esto está hablando acerca de Cristo y la salvación que viene por medio de Cristo.

También se menciona en Gálatas 3, versículo 8 y 16 si gusta leerlo…

Como ve, esa gran nación singular no es definitivamente una simiente; esto está hablando acerca de Jesucristo viniendo, el segundo Adán que va a comer del árbol de la vida y ser perfecto y morir por nuestros pecados y prepararnos para recibir el Espíritu Santo de Dios en nosotros; y así es como Cristo vive en nosotros. ¡Somos salvos por Su vida! Cristo viviendo en nosotros por medio del Espíritu Santo. Esto es lo que nos dice Romanos. Pero después, usted puede ver en Génesis 17 que Abraham se volvió el padre de muchas naciones; y eso no puede referirse a una simiente tampoco.

Voy a leerles de Deuteronomio 10 y versículo 19 donde Dios le dice a Israel: “Amaréis, pues, al extranjero; porque extranjeros fuisteis en la tierra de Egipto”.

Entonces a ellos se les dijo que amaran a los forasteros, aquéllos de otros países, los gentiles.

Y versículo 20: “A Jehová tu Dios temerás, a él solo servirás, a él seguirás, y por su nombre jurarás. Él es el objeto de tu alabanza…”.

Él es tu alabanza, les dijo. ¡Debemos de estar adorando y alabando a Dios, el mundo entero! Israel no hizo eso, nunca hizo eso, ¡ellos fallaron en eso! Es eso lo que Dios quería que hicieran y esto es lo que la Iglesia tiene que hacer hoy. ¡Ésa es la solución!

Fíjese, aquí vamos del Antiguo Pacto al Nuevo; en I de Pedro 2: 9 [KJV] dice: “PERO USTEDES SON UNA GENERACION ESCOGIDA”.

Uno era el Antiguo Testamento en un nivel físico y el Nuevo Testamento en un nivel espiritual, pero fíjese casi las mismas palabras, pero más profundidad aquí en el versículo 9 de I de Pedro 2 [RV-1960]: “Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable;”

Como ven aquí, Pedro está hablando acerca de un reino de sacerdotes, sacerdotes quienes podían enseñar la palabra de Dios a otra gente y ayudarles a entender cómo vivir el modo de estar bendecidos siempre ante Dios. ¡Pero aquí se les llama un sacerdocio santo, de hecho! Un sacerdocio de realeza, de gente que tienen el Espíritu Santo viviendo dentro de ellos, o tienen a Cristo viviendo en ellos por medio del Espíritu Santo. Esto de cualquier forma se llama una nación santa; ¡y lo es definitivamente esta vez espiritualmente!

Pero Israel ni siquiera lo hizo santo en el nivel de la letra de la ley, cómo deberían haberlo hecho. Entonces, aquí tenemos a la Iglesia de Dios. Como ven, si estamos haciendo nuestro trabajo antes que Jesucristo venga, ¡estamos nosotros mostrando las alabanzas de Dios! Deberíamos de tener nuestras vidas llenas de alabanza para Dios por las maravillosas bendiciones que nos ha dado y continúa dándonos repetidamente, aun antes que recibamos salvación en la familia de Dios y como la misma esposa de Jesucristo, si nosotros hacemos caso del mensaje de Dios antes de la Segunda Venida. Entonces no tenemos que ser resucitados para llegar a conocer a Dios.

Como ve, Dios tenía esa meta con la Israel antigua en un nivel físico o en un nivel de la letra de la ley.

Fíjese ahora lo que dice aquí en Hebreos 8 y versículo 6: “Pero ahora tanto mejor ministerio es el suyo, cuanto es mediador de un mejor pacto, establecido sobre mejores promesas”.

O sea, ¡uno puede ser perdonado de los pecados! ¡Ésa es una mejor promesa! ¡Uno puede recibir vida eterna! ¡Ésa es una mejor promesa! Uno puede ahora llamar a Dios el Padre su padre y orar a Él y Él va a llevarlo a Su familia para siempre, usted será un ser divino. Esto es lo que la Biblia enseña por todos lados, ¡realmente eso lo enseña! ¿Qué maravilloso es eso? ¡Qué inspirador y conmovedor es eso!

Fíjese, aquí es donde Israel falló; y no obstante tanta gente no entiende esto, ojalá que ellos vieran más de cerca estas Escrituras porque son tan inspiradoras y conmovedoras y tan animador. Versículo 7 de Hebreos 8: “Porque si aquel primero (el Antiguo Pacto) hubiera sido sin defecto, ciertamente no se hubiera procurado lugar para el segundo”.

No hay necesidad del segundo si el primero es perfecto. ¿Pero que había de mal con el Antiguo Testamento?

Versículo 8 “Porque reprendiéndolos [A ELLOS] dice: …”

¡A ELLOS! ¡El problema estaba con la gente! Bueno, ¿por qué tienen un problema? Aquí tienen el Antiguo Pacto con una ley perfecta. No es la ley de Dios la que está en problema o en falla; es perfecta, dice en Salmos 19:17. ¡Y dice que la falta estaba con ellos! ¡No tenían el Espíritu Santo! No podían resolver los problemas espirituales que tenían, los cuales son de naturaleza espiritual. No podían hacerlo. ¡Dios estaba mostrándole a todo Israel y al mundo que la falta está con nosotros! Vamos a tener que aprender que tenemos que tener otro espíritu. Y después, dice que Él va a escribir esas leyes en nuestros corazones, no en tablas de piedra.

Yo quiero leerles a ustedes o mencionarles aquí en conclusión… bueno, ustedes pueden… en Génesis 49 habla acerca de Jacob diciéndole a Efraín y Manasés, “…y sea perpetuado en ellos mi nombre…”.

Entonces proféticamente, éstos son Gran Bretaña y Estados Unidos y ellos son Israel, las dos naciones de la primogenitura, naciones de Israel en este tiempo del fin; y los judíos son la nación del cetro. Y Dios va a castigarlos primero si ellos no se arrepienten de sus pecados porque nosotros estamos inundados con pecado hoy día. Definitivamente, podemos ver eso si no sabemos nada o algo acerca de la Biblia. Y si usted lee El misterio de los siglos y lo estudia, usted entenderá eso en una forma muy vívida y clara.

Déjenme decirles que lo hará.

Pero yo quería mencionar esto acerca de Salomón; y él tuvo un hijo, Roboam, y después Jeroboam se rebeló en contra de su hijo y se llevó a las 10 tribus de Israel con él. Ellos siguieron a Jeroboam; y pues él era como el primer ministro de Salomón; realmente un gran hombre con mucha habilidad. Entonces él se llevó a las 10 tribus de Israel (no eran judíos), las 10 tribus de Israel las apartó de los judíos y las apartó de Jerusalén y del trono de David.

Ahora, pues, quiero decirles esto. ¡Hay un Jeroboam moderno! Un Jeroboam en el día actual que está mencionado en Amós 7; y él va a surgir en el escenario en este tiempo del fin; y nosotros acabamos de decidir de totalmente… pues hacer nuevamente el folleto Grande otra vez y añadir un capítulo que explica quién es este Jeroboam y de que se trata. ¡En este tiempo del fin como el Jeroboam antiguo! Cambiamos este libro en muchas, muchas formas; y lo actualizamos de manera que quisiéramos que aquéllos que gusten lo pueden pedir nuevamente, si ya lo hicieron. Pero este folleto es tanto más poderoso y tiene revelación acerca de este Jeroboam del tiempo moderno que lo va a asombrar a usted; ¡y quiero decirle asombrará! ¡Y es una maravillosa, maravillosa verdad! Entonces escriba solicitando este nuevo folleto y yo les diré que ustedes van a estar muy inspirados.

Hasta la próxima vez, soy Gerald Flurry, adiós amigos.