El libro más importante desde la Biblia

Transcripción de La Llave de David

Hola a todos y bienvenidos de nuevo al programa. Soy su presentador, Stephen Flurry, sustituiré a mi padre en el programa de hoy.

El año que viene se celebrará el centenario de la conversión de Herbert W. Armstrong a la verdad. Claro, él murió en 1986, pero su viaje espiritual comenzó en el verano de 1926, un verano en el que empezó a hacerse preguntas profundas. ¿Para qué estoy aquí? ¿Cuál es mi propósito? ¿Quién soy? ¿Cuál es el propósito y el plan de Dios para la humanidad? No tenía las respuestas a esas preguntas. No fue mucho después de empezar a hacerse esas preguntas tan serias que fue retado sobre dos temas: la teoría de la evolución y la observancia del Sábado, o si sería sábado o domingo. Y así, estos dos desafíos le impulsaron a sumergirse en un estudio de seis meses, noche y día, de la Palabra de Dios, la Santa Biblia. Y por supuesto, como dijo más tarde en su vida, el estudio de la Palabra de Dios continuó durante toda su vida. Pero esos seis meses iniciales, quiero decir, cambiaron abruptamente su forma de pensar sobre cada tema, cada tema, y empezó a encontrar las respuestas a estas preguntas tan importantes. Durante su larga y agitada vida, mientras continuaba en ese estudio, el Sr. Armstrong realmente desarrolló una comprensión única de la Palabra de Dios sobre tantos temas que han desconcertado a la humanidad.

Y este libro aquí, El misterio de los siglos, es producto de esa comprensión. Esta es la obra de su vida, básicamente. Lo produjo en el último año de su vida, en 1985. Murió a principios de 1986. Lo repartió entre los alumnos de segundo año del Ambassador College y se le llenaron los ojos de lágrimas. Él dijo: “Este es el regalo más valioso que podría darles”. Escribió sobre ello durante todo ese año. Dijo: “Creo que es el libro más importante que se ha escrito desde la Biblia”. ¡Esa es una afirmación bastante grande! Así de importante es este libro. Lo consideraba la obra más importante de sus cincuenta años de ministerio. Y aquellos de ustedes que sepan algo sobre Herbert Armstrong saben que fue un prolífico escritor y maestro. Dio cientos y cientos de mensajes en televisión y sermones. Escribió lo que deben haber sido miles de artículos, cartas, folletos, libros, y éste de aquí es el más importante de todos ellos. Dijo: “Creo sinceramente que puede ser el libro más importante desde la Biblia”.

Este año se cumplen 40 años desde la publicación de El misterio de los siglos. Bueno, en realidad no estuvo disponible durante varios años, y quizá tengamos tiempo para ello en otro programa. Tuvimos que luchar durante seis años en los tribunales para poder imprimir este libro y distribuirlo, porque quienes tomaron el control de la Iglesia de Dios Universal tras su muerte en enero de 1986 comenzaron a desmantelar todo lo que él defendía, todo lo que enseñaba y todos sus programas, muchos de ellos muy populares. Lo escuchaban y lo observaban millones y millones de personas. La circulación de su revista insignia, La Pura Verdad, superaba los 8 millones mensuales en 1985 y 1986.

Pero volviendo a El misterio de los siglos, lo repartió cuando terminó de imprimirse en el verano de 1985 y, luego, el 9 de septiembre de 1985, hace poco más de 40 años, se lo entregó a los estudiantes del colegio de Dios para que sirviera de libro de texto en su aprendizaje, permitiéndoles comprender los libros de la Biblia.

Veamos Colosenses capítulo 1. Comenzaremos nuestro estudio de la Palabra de Dios allí, y cuando lleguen ahí, por favor, tomen la Biblia y lean conmigo. Pero mientras buscan les leeré lo que escribió el 12 de septiembre de 1985. Este es el Sr. Armstrong. Dice: “Oro para que lea El misterio de los siglos junto con la Biblia, que éste haga que su Biblia cobre vida y sea comprensible”. Dice: “Ahora estoy en mis 94 años, y siento que este libro es el regalo más valioso que podría hacerle. Este libro es una expresión parcial de mi agradecimiento y gratitud hacia usted por ser un colaborador mío y de Jesucristo”. Dijo: “De todo corazón, aprecio y agradezco a Dios su participación conmigo en esta maravillosa obra en estos días finales”. Se emocionó mucho al entregar este libro a los alumnos de segundo año de Ambassador. Es bastante emotivo, incluso en sus escritos durante todo ese último año de su vida, en los que hablaba de esta labor de amor. ¡Y quería dárselo a la mayor audiencia posible!

Esto es Colosenses 1 y versículo 23. Él dice, Pablo dice: “Si en verdad permanecéis fundados y firmes en la fe, y sin moveros de la esperanza del evangelio que habéis oído, el cual se predica en toda la creación que está debajo del cielo; del cual yo Pablo fui hecho ministro”. Pablo, aquí, está diciendo a los hermanos de Dios: Tienen que permanecer afianzados sobre una base segura espiritualmente. Tienen que permanecer anclados en la verdad. Jesús dijo: “Conoceréis la verdad y la verdad os hará libres”.

Versículo 25: “De la cual fui hecho ministro, según la administración de Dios que me fue dada para con vosotros, para que anuncie cumplidamente la palabra de Dios”; esa palabra, ‘administración’, “según la administración”, pueden buscar el significado allí en el griego. Significa mayordomía o administración. Es decir, Dios le dio (a Pablo) la misión de llegar a la mayor audiencia posible en su tiempo, y encargó lo mismo al Sr. Armstrong.

Noten el versículo 26, dice: “El misterio que había estado oculto desde los siglos”. Quiero decir, de aquí viene el título de este libro, El misterio de los siglos. Ha estado oculto. Pablo dijo esto al pueblo de Dios. ¡La mayoría de la gente es ciega! Pueden leer más sobre esto en 2 Corintios 4, versículos 3 y 4. Habla del dios de este mundo en ese pasaje, y dice que el dios de este mundo (que resulta ser Satanás el diablo), ha cegado las mentes de los hombres.

En el Evangelio de Juan, capítulo 3, dice que Jesús vino a la Tierra como luz para el mundo, pero los hombres amaron las tinieblas.

Esto nos lleva a lo que motivó al Sr. Armstrong a escribir este libro. Está justo ahí, en los capítulos iniciales de la Biblia: Génesis 2, Génesis 3; llegaremos a eso en un segundo.

Pero aquí dice: “El misterio que había estado oculto desde los siglos y edades, pero que ahora ha sido manifestado a sus santos”. A su ‘pequeño rebaño’, así describió Jesús a la verdadera Iglesia. A una minoría de personas, a un puñado de personas, se les ha dado a conocer este misterio.

El Thayer’s Lexicon dice: “El misterio es una cosa oculta o secreta, no evidente al entendimiento”.

Cuando el Sr. Armstrong entregó este libro, dijo: “Este es un libro que reúne todas las piezas del rompecabezas para que puedan entender la Biblia”. Como dijo el profeta Isaías, está escrito “un poquito allí, otro poquito allá”. Hay que unir las piezas del rompecabezas, y este libro lo hace, y por eso el Sr. Armstrong estaba entusiasmado, porque ayuda a entender la Biblia. Y la Biblia es para nuestro tiempo, hoy. Es para los últimos días, principalmente.

Pero ¿por qué hay tanta confusión y división sobre lo que significa leer la Biblia, estudiar la Biblia? Por cierto, vivimos en una época en la que la popularidad de la Biblia está aumentando aquí en Estados Unidos. Se habla mucho de religión, de la Biblia y, sin embargo, al examinar las creencias de una denominación tras otra se aprecian muchas diferencias. Se ven muchas interpretaciones diferentes. ¿Por qué es así? ¿Por qué debe haber tanta confusión cuando se trata de religión?

El versículo 27, hablando de este misterio y darlo a conocer a los santos, dice: “A quienes Dios quiso dar a conocer las riquezas de la gloria de este misterio entre los gentiles; que es Cristo en vosotros, la esperanza de gloria”. Esto es lo que es un verdadero cristiano, alguien sometido a esta administración, esta mayordomía, la dispensación, sometido al gobierno de Dios, al gobierno de la familia de Dios. Y entonces Cristo puede vivir en usted, y si Él vive en usted, lo hace como lo hizo en el primer siglo. Cristo en usted: eso es un gran misterio para la mayoría de este mundo. Sin embargo, El misterio de los siglos le abrirá la mente para comprender la verdad sobre lo que Dios está haciendo en la Tierra. ¿Cuál es su propósito? ¿Quién y qué es Dios? Ese es el primer capítulo de este libro.

Hace poco les decía a mis alumnos que hay todos estos embajadores para la paz, que viajan por todo el mundo intentando reunir a los grupos terroristas con los israelíes, o lo que sea. Y como les dije, si tan sólo pudieran leer el capítulo 4 de El misterio de los siglos, El misterio de la civilización. Eso por sí solo es una visión que expande la mente. Se puede entender por qué este mundo es como es, por qué hay tanta maldad, tanta oscuridad, tanta violencia y crimen, tanto pecado. Es decir, estamos saturados de pecado. Está por todas partes, en todas partes, y es así porque el dios de este mundo, como explica el Sr. Armstrong aquí, ha sobrecargado el aire con sus actitudes, sus impulsos y su influencia. “El príncipe de la potestad del aire”, léalo en Efesios 2, versículo 2. Está ahí mismo.

Usted puede comprenderlo. Sólo hay que indagar un poco en la Palabra de Dios, y aquí tiene El misterio de los siglos para guiarle en su estudio.

Mi padre escribió esto en el folleto de Colosenses. Toda la literatura que ofrecemos, por cierto, es gratuita y sin compromiso. Queremos darla libremente, como lo hizo el Sr. Armstrong. Aquí dice: “La fiesta de la cosecha (de los Tabernáculos) es acerca de llevar este mensaje al mundo, para ‘cosechar’ a tantos como podamos”. Es una fiesta que la Iglesia de Dios celebra anualmente. Se llama en la Biblia “la fiesta de la cosecha”. Y se puede ver a Jesús observando esta fiesta en Juan 7, Juan 8, Juan 9, Juan 10; está justo ahí, en el corazón del Evangelio de Juan. Es la Fiesta de la Cosecha o los Tabernáculos, y representa el Maravilloso Mundo de Mañana, cuando el gobierno de Dios sustituirá al gobierno de los hombres en toda la Tierra, en todas las naciones (Apocalipsis 11 y versículo 15). Dice aquí: “Y eso continuará en el Mundo de Mañana, donde un libro de texto principal en todas las instituciones educativas será El misterio de los siglos, por Herbert W. Armstrong”. Dice: “Cada vez que este misterio fue revelado en el pasado, Dios quiso que sus elegidos lo dieran a conocer a los gentiles”. Por eso, Dios lo revela. No lo revela para que nos sentemos a mirarlo o disfrutarlo nosotros solos. ¡Es para el mundo! Y esa es la mentalidad que tenía el Sr. Armstrong.

Y esos ministros laodicenos que se hicieron cargo después de su muerte, no tenían esa misma mentalidad. No tenían esa visión. ¡Era justo lo contrario! ¡Uno de ellos dijo que tenía “el deber cristiano” de mantener El misterio de los siglos fuera de imprenta! Eso viene directo de la mente del diablo, a quien le encanta ocultar la verdad.

El versículo 28 dice: “A quien anunciamos, amonestando a todo hombre, y enseñando a todo hombre en toda sabiduría, a fin de presentar perfecto en Cristo Jesús a todo hombre”. Ya ven, viviendo de la misma manera que Jesús lo hizo. Jesús dijo en Juan 14:6: “Yo soy el camino”. Sólo sígueme, Tomás. Sólo sigue mis pasos. Sigue mi ejemplo. También había mucha confusión religiosa en tiempos de Cristo. Y Él no llegó y se puso a buscar alguna denominación a la que unirse. No apareció y dijo, Bueno, creo que los fariseos aquí parecen muy religiosos. Puede que estén en algo. No, simplemente vino y dijo la verdad. Declaró al Padre. ¡Jesús es la verdadera religión! Los cristianos son seguidores de Cristo. Así que si usted es un cristiano sólo de nombre y, si realmente no sigue Su ejemplo, le diré que hay muchos así en este mundo actual. Pero usted puede salir de esa confusión y aprender la verdad y comprender los misterios, todos estos grandes misterios de la vida. ¿Quién y qué es Dios? ¿Qué hay de los ángeles y los espíritus malignos? Hoy en día se oye hablar más de ello porque vemos tanta división, conflictos y violencia. Estamos presenciando asesinatos. ¿Por qué está pasando eso? ¿Quién está detrás de ello? Bueno, hay un capítulo sobre Satanás el diablo y los espíritus demoníacos, y también sobre los ángeles de Dios, los ángeles justos. Le abrirá la mente a la verdad.

Cuando el Sr. Armstrong comenzó a distribuirlo, este libro apenas duró 32 meses en los estantes, pero llegó a más de un millón de personas. Hubo una versión de tapa dura en 1985 y una versión de tapa blanda, que se publicó por entregas en la revista La Pura Verdad. El primer programa, el homenaje que realizaron dos semanas después de su muerte, El Mundo de Mañana, anunciaron El Misterio de los siglos y 107.000 personas lo solicitaron. Fue un éxito rotundo, tremendamente popular. Sin embargo, el gobierno laodiceno que sustituyó al Sr. Armstrong lo despreció. Lo odiaban.

Hoy sólo quiero animarles. Sé que muchos de ustedes probablemente ya tienen su propio ejemplar, pero si no es así, quiero animarles a que llamen a nuestros operadores y soliciten un ejemplar gratuito de este maravilloso libro.

El misterio de los siglos cumple 40 años, y hoy es más importante que nunca porque nos acercamos mucho al regreso de Jesucristo a la Tierra. Pueden mirar hacia atrás en esta historia y ver por qué Dios estaba poniendo tanto énfasis en él a través del Sr. Armstrong. Todos esos elogios. Quiero decir, incluso los ministros laodicenos, el que estaba a cargo, lo alababa unos meses después de la muerte del Sr. Armstrong, pero eso pronto cambió. Se rodeó de todos estos eruditos que despreciaban la verdad de Dios. El Sr. Armstrong no, él la amaba y quería distribuirla a la mayor audiencia posible.

Aquí lo vemos el 9 de septiembre de 1985, presentando este libro recién salido de la imprenta a los estudiantes de segundo año del Ambassador College.

“La Biblia es como un libro que ha sido cortado en unos dos mil o tres mil pedazos, y hay que juntarlos todos en el orden correcto o no se pueden entender. Este libro los reúne. Sin embargo, este libro es sólo una sinopsis. Se podría decir que es la ‘esencia’ de la Biblia. Una sinopsis. No lo cubre todo, pero cubre el hilo conductor de la Biblia para que puedan entenderla y comprender los demás detalles cuando los lean en la Biblia. Les abrirá la Biblia para que la entiendan. Para eso sirve, para hacer la Biblia clara y comprensible. Y Dios es un Dios tan grande cuando llegamos a conocerlo de verdad y a saber quién es, qué es y lo real que es. Y quiero decirles que tienen que leer cada palabra y repasarla más de una vez. No van a aprovechar al máximo este libro en una sola lectura. Este es un libro que, después de haberlo leído, podrán leerlo una segunda vez y, más tarde, una tercera. Este libro no pretende sustituir a la Biblia, su propósito es ayudarles a entenderla. Deben leer la Biblia con él, y esto es para que, al leerla, les resulte clara y comprensible, y para que descubran su significado como nunca antes lo habían visto. Y espero que sea una bendición para ustedes. Espero que lo disfruten, les proporcionará una gran felicidad y satisfacción. Espero que disfruten leyéndolo y que, más que con cualquier otro libro que hayan leído excepto la Biblia, quizá en cierto sentido éste haga que incluso la Biblia resulte más clara y sencilla, y que a partir de ahora la disfruten aún más. ¿Me disculparán si me emociono un poco por haberlo conseguido, por haberlo publicado? Hoy es un gran día en mi vida al poder entregar ejemplares de este libro a cada uno de ustedes”.

Eso fue en septiembre de 1985, hace 40 años. ¡Hace 40 años! Dejó de imprimirse a mediados de 1988 y así siguió hasta que lo volvimos a imprimir en 1997. Y entonces la Iglesia de Dios Universal nos llevó a los tribunales para intentar impedirnos distribuirlo, y ese litigio se prolongó por seis años. Fue una lucha agotadora. Puede leerlo todo en Raising the Ruins, y también está disponible gratis [en inglés]. Es una historia apasionante porque luchábamos por la verdad, luchábamos por la verdad de Dios.

Mencioné ese pasaje en Génesis 2, noten esto. Se trata de los dos árboles. Necesitamos más de esto en la religión actual porque así se estableció el mundo tal y como lo conocemos. Este es el fundamento de lo que Pablo llama “el presente siglo malo”. Esa no es mi apreciación; es la del apóstol Pablo (Gálatas 1:4). Mucha gente no lo cree, pero él llama a este mundo malo, y tanta gente —incluso religiosa— piensa que es bueno.

Versículo 16 de Génesis 2: “Y mandó [el Eterno] Dios al hombre, diciendo: De todo árbol del huerto podrás comer; (17) mas del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás”. Es decir, este árbol del conocimiento del bien y del mal es el camino que le parece correcto al hombre, como dice Proverbios 14, pero termina en la muerte. Termina en miseria. No podemos llevar nuestras vidas basadas en suposiciones. Tenemos que estar, como dijo Pablo en Colosenses 1, “fundados en la verdad”. Ese es el único fundamento seguro que hay en este mundo tan inestable. Bueno, ya saben lo que ocurrió aquí en Génesis 2 y en Génesis 3. Eva (pueden leerlo en Génesis 3:6), tomó del árbol del conocimiento del bien y del mal y pensó: Bueno, esto es bueno. Es correcto. Es agradable. Es sabroso. Y se rebeló contra su Creador. Y llegó Adán e hizo lo mismo. Y fíjense en la acción que Dios llevó a cabo. Mucha gente en el mundo de la religión no puede entender esto. ¿Por qué tomaría este tipo de acción Dios, si ahora mismo está intentando desesperadamente salvar a todos? Léanlo ustedes mismos.

Génesis 3, versículo 22: “Y dijo [el Eterno] Dios: He aquí el hombre es como uno de nosotros, sabiendo el bien y el mal; ahora, pues, que no alargue su mano, y tome también del árbol de la vida, y coma, y viva para siempre. (23) Y lo sacó [el Eterno] del huerto de Edén, para que labrase la tierra de que fue tomado. (24) Echó, pues, fuera al hombre, y puso al oriente del huerto de Edén querubines, y una espada encendida que se revolvía por todos lados, para guardar [o preservar, o proteger] “el camino”, dice, “del árbol de la vida”.

Y así, como explica Herbert Armstrong en este libro, fue en ese momento cuando Dios cerró el árbol de la vida, que simbolizaba el Espíritu Santo de Dios, el poder de Dios, la vida de Dios, la mente de Dios. La humanidad fue separada del Espíritu Santo, ¡y así iba a permanecer durante seis mil años! Y ya nos acercamos a los últimos días de ese periodo de seis mil años. Y vemos un mundo lleno de caos y confusión. Vemos religiones, una Babilonia de confusión religiosa, como solía decir el Sr. Armstrong. Y por supuesto, vemos mucho crimen y violencia, como la había en la Tierra en los días anteriores al Diluvio. Eso se describe en Génesis 6. Lucas 17 dice que en los últimos días, antes del regreso de Jesucristo, todo será como antes del Diluvio.

Así que esta parte de las Escrituras (lo que acabamos de leer, los versículos 22 a 24), una comprensión más profunda de este pasaje, es lo que motivó al Sr. Armstrong a trabajar en El misterio de los siglos en los últimos meses de 1984 y luego los primeros cinco o seis meses de 1985. En la Declaración del Autor del libro, dice: “Yo no me había dado cuenta cabalmente del significado del suceso revelado en Génesis 3:22-24, que Dios verdaderamente había cerrado el acceso al Espíritu Santo y la vida eterna a la humanidad en general hasta que Satanás fuera removido al tiempo de la Segunda Venida de Cristo”. Esta es una verdad fundamental que ni siquiera las religiones cristianas tradicionales comprenden. El Sr. Armstrong dice que aquí llegó a comprenderlo en profundidad, y por eso emprendió este viaje para reunir, bajo la inspiración de Dios Mismo, este material en forma de libro. Todas las grandes preguntas, todas las cuestiones importantes de la vida, respondidas para usted en un libro de texto que explica tanto sobre el malvado mundo actual y sobre el Maravilloso Mundo de Mañana.

No tengo tiempo para leer Colosenses 4, pero Pablo tuvo su lucha y su guerra para difundir y distribuir el misterio. Vayan y lean esos últimos versículos, o los primeros versículos en Colosenses 4.

Pero como se nos acaba el tiempo, terminaremos aquí y los animo de nuevo a que llamen hoy a nuestros operadores y soliciten El misterio de los siglos.