El Gobierno cancela el proyecto de Elon Musk para reducir el despilfarro gubernamental

El Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE, por sus siglas en inglés) ha sido cancelado discretamente, ocho meses antes de lo previsto. El pasado noviembre, el presidente electo Donald Trump puso a Musk al frente de un grupo de trabajo para desmantelar la laberíntica burocracia del gobierno federal, las regulaciones restrictivas y el gasto obscenamente despilfarrador. Prometió que su trabajo se concluiría a más tardar el 4 de julio de 2026, porque “un gobierno más pequeño, con mayor eficiencia y menos burocracia, será el regalo perfecto para Estados Unidos en el aniversario número 250 de la Declaración de Independencia”. Casi de inmediato, se descubrieron miles de millones en despilfarro, incluidos 4,7 billones de dólares en pagos del Tesoro estadounidense que ni siquiera especificaban a qué se destinaban. Sin embargo, Musk se enemistó con el presidente Trump y renunció en gran medida a DOGE después de que el presidente apoyara firmemente el “grande y hermoso proyecto de ley” (que se estima que añadirá 3,4 billones de dólares a la deuda nacional de Estados Unidos en 10 años) y lo convirtiera en ley el 4 de julio. DOGE se quedó en el camino. El director de la Oficina de Gestión de Personal, Scott Kupor, declaró a Reuters a principios de este mes que DOGE “no existe”. Estados Unidos no tendrá un gobierno más pequeño con menos burocracia para el 4 de julio de 2026.