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36 años después de la caída del Muro de Berlín
El 9 de noviembre marcó un aniversario importante que no podemos permitirnos olvidar. El 9 de noviembre de 1989 cayó el Muro de Berlín, uniendo Alemania Oriental y Occidental.
Fue exactamente 51 años después de los infames pogromos de la Alemania nazi contra los judíos en 1938, 66 años después de que Adolfo Hitler fuera arrestado por su famoso Putsch de la Cervecería el mismo día en 1923, y 71 años después de la proclamación de la desastrosa República de Weimar en 1918.
Vea a la Alemania de hoy y verá cómo se levantan todas sus restricciones de posguerra y resurgen los males históricos asociados a este día.
Qué giro tan espectacular para una nación que se encontraba en escombros en 1945.
“[E]n la época de la Segunda Guerra Mundial, todas las ciudades en Alemania de más de 50.000 habitantes quedaron en un montón de ruinas, y también un gran número de pueblos más pequeños. Una de cada cuatro casas en toda Alemania había sido destrozada. La mayoría de las ciudades fueron destruidas en un 80%”, escribió el ya fallecido Herbert W. Armstrong en La Pura Verdad de agosto de 1959.
Los dirigentes occidentales le aseguraron a nuestros pueblos que una Alemania desmoralizada nunca se alzaría de nuevo para atacar. Pero mientras todo el mundo se enfocaba en las cenizas de las ciudades alemanas, el Sr. Armstrong profetizó, basándose en varios pasajes bíblicos, que Alemania se levantaría de nuevo y lideraría un bloque de poder europeo unido.
La reunificación de Alemania y la caída de la Unión Soviética aceleraron enormemente el cumplimiento de esta profecía.
Alemania es hoy la tercera mayor economía del mundo. Una Alemania sin restricciones podría convertir este éxito industrial en una potencia militar de la noche a la mañana. Ya está ocurriendo.
De potencia económica a potencia militar
El Telegraph británico hizo una observación sorprendente la semana pasada. Tras enumerar algunas de las compras militares de Alemania en 2024, escribió: “En conjunto, las compras de Alemania el año pasado sumaron más de tres veces la cantidad combinada gastada por Gran Bretaña, Francia y Polonia en el mismo periodo”.
¡Esto es asombroso! La nación que fue reducida a escombros hace 80 años por cometer terribles atrocidades contra estas tres naciones, ¡ahora encarga el triple de armas!
En 2022, el entonces canciller alemán Olaf Scholz anunció que Alemania crearía un nuevo fondo de 100.000 millones de euros para mejorar rápidamente el equipamiento del Ejército. Pero esto era sólo el principio. El pasado mes de marzo, Alemania aprobó un cambio constitucional histórico que le permite pedir dinero prestado y gastar cientos de miles de millones más en infraestructuras y armamento.
El mes pasado, Politico reveló las compras de armamento previstas por el gobierno alemán para el presupuesto de 2026, que aún no ha sido aprobado. La lista de deseos militares asciende a la impresionante cifra de ¡434.000 millones de dólares!
Algunos de estos artículos “son compras a más largo plazo para las cuales no hay un plazo de tiempo claro”, escribió Politico. Pero eso no es más que una forma de ocultar el espectacular ascenso de Alemania. Para contextualizar, Estados Unidos gastó unos 150.000 millones de dólares en sistemas de armamento en el año fiscal 2024.
Estas cifras son aterradoras si se tiene en cuenta lo que hierve bajo la superficie.
Un espíritu nazi que nunca murió
La cronología de los acontecimientos, sumada a ciertas estadísticas alarmantes desde la caída del muro en noviembre de 1989, debería servir como una advertencia suficientemente clara de que la Alemania nazi está regresando con fuerza y con venganza.
Justo después de la caída del muro, de 1990 a 1991, el número de extremistas de derechas organizados aumento del 32.000 a 40.000. El número de incidentes racistas violentos aumento por 10, ¡hasta 1.483! ¡Aún más aterrador, las encuestas indicaban que entre el 50% y el 60% de los policías de algunas zonas simpatizaban con la causa nazi! En algunas zonas, las fuerzas del orden se mostraron, en el mejor de los casos, poco decididas a prevenir los delitos de odio racial. Los funcionarios alemanes admitieron que habían subestimado gravemente al movimiento nazi.
La situación empeoró en 1992, cuando el número estimado de extremistas de derechas organizados superó los 65.000, y más de 2.100 incidentes raciales violentos provocaron la muerte de 17 personas. Las explosiones y los atentados con bombas incendiarias aumentaron un 33% respecto a 1991.
¡Entre 1993 y 1997, las agresiones contra extranjeros en Alemania aumentaron de 6.000 a 9.000 al año!
En 1998, escribí un artículo sobre un partido pro-nazi que obtuvo escaños en el Parlamento del Estado de Sajonia-Anhalt, en Alemania. En aquel momento, la noticia conmocionó al mundo. Hoy, ¡otro partido de extrema derecha es el más popular en Alemania!
En 1998, advertí: “Alemania ya ha sumido al mundo en dos guerras mundiales. ¿Cómo no estar profundamente conmocionados por la victoria electoral pro-nazi? Sobre todo porque el mundo está ahora repleto de armas nucleares y Alemania es la gran superpotencia económica de Europa. También su ejército es mucho más fuerte de lo que la mayoría de la gente cree”.
Luego, en 1999, Alemania bombardeó y los aliados de la otan bombardearon Yugoslavia. “Fue la primera intervención de la otan sin el mandato de las [Naciones Unidas] y con participación alemana”, escribió Deutsche Welle.
A mucha gente le molestó que estas acciones violaran el derecho internacional. Como escribí en mi folleto Germany’s Conquest of the Balkans, [La Conquista de los Balcanes por Alemania; disponible en ingles] ésta fue una época vergonzosa para la alianza de la otan. Y si se fija en la cronología de los acontecimientos, ¡todo fue orquestado por Alemania!
Los serbios lucharon junto con los Aliados en dos guerras mundiales, y Alemania luchó contra nosotros en ambas. Qué extraño ver esas alianzas revertidas hoy. ¡No hemos aprendido de esta historia y vamos a pagar un precio aterrador!
La simple verdad es que Serbia no es una amenaza para Europa ni para Estados Unidos. ¡Pero Alemania ha sido siempre una amenaza peligrosa para Europa y el mundo! Y nos demos cuenta o no, en la actualidad sigue siéndolo, mucho más que en el pasado.
Los únicos ganadores reales de la guerra de 1999 en Yugoslavia fueron Alemania y el Vaticano. El tiempo demostrará que Estados Unidos y Gran Bretaña fueron los grandes perdedores. El conflicto de Kosovo los hizo más débiles a medida que Alemania crecía en poder.
El aumento del odio hacia los judíos
En 1990, pocos meses después de la caída del muro, una encuesta reveló que más de un tercio de los alemanes del este y del oeste consideraban que “no tenían por qué avergonzarse del legado del fascismo alemán”.
En 1991, una encuesta Der Spiegel reveló que el 62% de los alemanes pensaba que era mejor “no hablar tanto de la persecución de los judíos”. Al año siguiente, el 36% de los alemanes encuestados estuvo de acuerdo en que “los judíos tienen demasiada influencia en el mundo”. Otra encuesta reveló que una cuarta parte de los escolares alemanes pensaba que las historias del Holocausto judío eran “muy exageradas”.
Poco después de la caída del Muro de Berlín, Alemania estaba dispuesta a dejar atrás su pasado. Pero vea dónde está hoy. En su discurso de ayer, el presidente alemán Frank-Walter Steinmeier dijo:
Ochenta y siete años después de los pogromos del 9 de noviembre de 1938, el abismo de la historia alemana, el antisemitismo no ha vuelto, porque siempre estuvo ahí. Pero desde el 7 de octubre de 2023, también ha aumentado bruscamente aquí en Alemania. Proviene de la derecha, de la izquierda, del centro, y existe entre los inmigrantes musulmanes. Los judíos tienen miedo de mostrarse abiertamente; los padres judíos envían a sus hijos a la escuela con una sensación de malestar; los estudiantes judíos son tratados con hostilidad; los hombres que llevan kipá son atacados violentamente a plena luz del día. Nosotros, de entre toda la gente —los descendientes de aquellos que fueron perpetradores o espectadores el 9 de noviembre de 1938, incapaces de mostrar solidaridad con nuestros vecinos judíos o que miraron hacia otro lado— somos incapaces de poner fin a este antisemitismo.
El 9 de noviembre de 1938 fue cuando la Alemania nazi dirigió un pogromo contra los judíos que culminó en el Holocausto y la muerte de 6 millones de judíos.
Merriam-Webster define pogromo como “una masacre organizada y saqueo de personas indefensas (…) específicamente: una masacre de judíos”. Son los pogromos, en plural, los que han asolado el continente europeo durante siglos. La Inquisición acabó matando a 50 millones de personas. Es aproximadamente el número de muertos durante la Segunda Guerra Mundial. Por supuesto, los judíos no fueron los únicos asesinados en la Inquisición.
¿Realmente creemos que Europa ha logrado superar su historia?
Considere que el odio hacia los judíos está aumentando de nuevo hoy en día, justo cuando Alemania está desarrollando la maquinaria de guerra más aterradora jamás vista. ¿Podemos permitirnos correr el riesgo?
El ascenso de un líder malvado
El 6 de noviembre del año pasado, un día después de que los estadounidenses votaran, la coalición alemana colapsó. Desde entonces, Alemania ha formado un nuevo gobierno, pero la gente ya dice que también está a punto de colapsar.
El 9 de noviembre es también el aniversario del Putsch de la Cervecería de Hitler, cuando intentó usurpar ilegalmente el poder. Adolf Hitler fue uno de los líderes más malvados de la historia, y su reinado fue profetizado en Apocalipsis 17. El mismo capítulo profetiza el ascenso de otro líder autocrático malvado que aprovechará este ascendente poder militar alemán y lo conducirá una vez más a la guerra.
Aunque Hitler fue destructivo, nunca logró la dominación mundial. Este próximo líder dirigirá a 10 naciones europeas para terminar lo que Hitler comenzó (versículos 12-13) y ¡causará el peor sufrimiento que este mundo jamás haya visto!
El Sr. Armstrong proclamó en 1934 el surgimiento de un dictador mundial al mando del Sacro Imperio Romano. Por eso pronosticó que Alemania se reunificaría.
Daniel 8:23 advierte que “se levantará un rey altivo de rostro y entendido en enigmas”, refiriéndose al venidero líder de Alemania. Lo sabemos al juntar esta profecía con otras. Una profecía de Daniel 11:40-45 dice que “el rey del norte” se levantará “al cabo del tiempo”, refiriéndose a una superpotencia europea dirigida por Alemania. Isaías 10:5-19 da una profecía similar, añade que este líder será “el rey de Asiria”. Los alemanes modernos son descendientes de la antigua Asiria. (Para comprobarlo, lea “The Remarkable Identity of the German People” [La notable identidad del pueblo alemán; disponible en inglés]).
Basándose en estas y otras profecías, el Sr. Armstrong advirtió en 1945 tras la rendición de Alemania:
La guerra ha terminado en Europa—¿o no? Tenemos que despertar y darnos cuenta de que ahora mismo es el momento más peligroso de la historia nacional de Estados Unidos, en lugar de suponer que ahora tenemos paz! (…) No entendemos la minuciosidad alemana. Desde el comienzo mismo de la Segunda Guerra Mundial, han considerado la posibilidad de perder este segundo asalto, como perdieron el primero, y han planeado cuidadosa y metódicamente, en tal eventualidad, el tercer asalto, ¡la Tercera Guerra Mundial!
Desde la caída del Muro de Berlín, los preparativos de Alemania para cumplir esta profecía se han acelerado enormemente. Sólo está esperando a ese profetizado hombre fuerte. Entonces puede estar seguro de que nuestro mundo se verá atrapado una vez más en una guerra mundial, sólo que esta vez, con armas nucleares.
La historia más trágica
El Sr. Armstrong murió casi cuatro años antes de la caída del Muro de Berlín. Él nunca vio el cumplimiento profético sobre el que pasó toda su vida advirtiendo.
Pero la verdadera tragedia de esto es que la Iglesia que él fundó, la Iglesia de Dios Universal (idu), no continuó su advertencia incluso cuando estas profecías se cumplieron.
El Informe del Pastor General de la idu dijo el 21 de noviembre de 1989 (el énfasis es mío):
Una emisora de noticias le pregunta a la Iglesia sobre profecía: Después de la espectacular noticia de la apertura del Muro de Berlín, recibimos inesperadamente una llamada de una emisora de noticias de Seattle. El director de noticias conocía bien el programa El Mundo de Mañana y el hecho de que durante más de 40 años la Iglesia había estado prediciendo la reunificación de Europa de alguna forma. Pidió comentarios al aire sobre si la Iglesia creía que la apertura del Muro era el comienzo de los acontecimientos proféticos del fin de los tiempos.
Respondimos que era prematuro hacer declaraciones de ese tipo, pero que la Biblia era muy clara sobre un consorcio de 10 naciones en Europa. También señalamos que la historia demuestra que los episodios pasados de unificación europea no han resultado positivos para el resto del mundo y que la Iglesia seguiría vigilando los acontecimientos muy de cerca.
El director de noticias se mostró decepcionado de que no proclamáramos que éste es el comienzo absoluto de los acontecimientos del tiempo del fin, pero fue interesante que dijera que lo que la Iglesia ha pronosticado basándose en la Biblia se acercaba notablemente a lo que parece estar sucediendo.
Como escribí en mi libro sobre El mensaje de Malaquías:
¡El entendimiento profético superficial como ese hará que los líderes de la idu crean que los eventos son “prematuros” hasta el mismo momento en que se encuentren padeciendo en la Tribulación! La respuesta de la idu a la pregunta del reportero no fue la respuesta de un “vigilante”. Esos líderes de la Iglesia no aprendieron ese planteamiento del Sr. Armstrong. ¿Podría usted imaginarse al Sr. Armstrong hablando de esa manera? Sólo porque el Sr. Armstrong no fue perfecto en su entendimiento profético (como tampoco lo fue Pablo), estos líderes se van a un extremo alarmante. Como resultado, no están despertando al pueblo como se supone que lo hace el “que vela”.
Yo, como aquel director de noticias, quedé “desilusionado”; no, más bien ¡quedé angustiado por esa respuesta! Se están cumpliendo muchas más profecías importantes ahora que en los 15 años anteriores a la muerte del Sr. Armstrong, ¡y la Iglesia de Dios Universal profetiza cada vez menos!
La Iglesia que fundó el Sr. Armstrong ya no es reconocible, pero la Iglesia de Dios de Filadelfia (idf) continúa su legado.
Nuestro inicio también está ligado a la caída del Muro de Berlín.
La ruptura de la Iglesia de Dios ocurrió el 7 de diciembre de 1989. Sólo cuatro semanas después de la caída del Muro de Berlín, Dios levantó otra Iglesia, la idf, para seguir proclamando Sus profecías.
Por lo tanto, el aniversario de la caída del Muro de Berlín está vinculado a nuestra obra actual y nos hace recordar nuestra responsabilidad de advertir sobre el dramático ascenso de Alemania.
