2024: Ocho tiroteos masivos, y sumando

Un estudiante de 17 años de la preparatoria Perry, en Iowa, asesinó ayer a un alumno de sexto grado e hirió a otros cuatro estudiantes y a un administrador de la escuela. Dylan Butler iba armado con una escopeta y una pistola: luego se suicidó. Las autoridades no han revelado el motivo y las investigaciones continúan.

Butler se identificó como no binario en sus cuentas de Instagram y TikTok. Utilizaba los pronombres “él/ellos” y publicaba imágenes de la bandera del orgullo. Sus amigos dijeron que era una persona tranquila que había sufrido acoso durante años.

Este ha sido el séptimo tiroteo masivo de 2024. Ha ocurrido otro desde entonces y, estadísticamente, es posible que haya ocurrido otro para cuando usted vea este video hoy más tarde.

Mass Shooting Tracker [El rastreador de tiroteos masivos] es un sitio web de colaboración abierta distribuida que define “tiroteo masivo” como la violencia con armas de fuego en la que mueren o resultan heridas cuatro o más personas. Sus registros se remontan únicamente a 2013, pero en la última década, la frecuencia de los tiroteos masivos en Estados Unidos se ha más que duplicado: de 339 al año a 748 al año.

Algo está seriamente mal en la sociedad estadounidense. Las familias desintegradas de la nación están produciendo cada vez más criminales y asesinos.

Existe una razón que explica semejante violencia horrorosa: Estados Unidos se ha apartado de las leyes de Dios que rigen la vida familiar y la moralidad privada. En la Biblia, Dios advierte de los resultados de la rebelión: “Haz una cadena, porque la tierra está llena de delitos de sangre, y la ciudad está llena de violencia” (Ezequiel 7:22-23).